El Frente de Todos, que lleva a Alberto Fernández como candidato a presidente, es la fuerza política que le otorga mayor desarrollo en su plataforma electoral a las políticas para la igualdad de género pero estos temas no fueron eje de su campaña. Las agrupaciones de izquierda --FIT y Nuevo Mas--, le dieron más visibilidad a la agenda feminista en sus spots. En cambio, el macrismo y la fórmula que encabeza Roberto Lavagna (Consenso Federal 2030) ningunearon el tema y casi no hicieron referencia ni en sus plataformas ni en sus campañas audiovisuales, según revela un monitoreo realizado por el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) en el que se analiza el lugar que ocupan los derechos de las mujeres y las disidencias en las propuestas electorales de los principales postulantes a la presidencia.

A pesar de que se esperaba que tuvieran un espacio más relevante en los debates con vistas a las PASO, solo el tema del aborto apareció tangencialmente al principio pero perdió peso con el correr de la campaña: se impuso una agenda más urgente, como la crisis económica, los jubilados y la falta de acceso a los medicamentos por el lado de la oposición que tiene más chances electorales, y el anclaje en “no volver al pasado” y la corrupción, desde el oficialismo, pero se perdió la oportunidad de incorporar a esas discusiones la perspectiva de género. ¿Qué rol tuvieron las mujeres de cada una de las fuerza en este tramo de la campaña? ¿En qué medida condiciona el voto el posicionamiento de las candidaturas frente al derecho a la interrupción de embarazo?

Aborto

“Se pensó que los temas de género y diversidad iban a ser temas inevitables en esta campaña, que los candidatos los iban a mencionar, pero la verdad es que su mayor presencia fue su ausencia de los debates electorales”, apuntó a Página/12 Luis Alberto Quevedo, sociólogo, especialistas en comunicación política. “Casi todas las voces que aparecieron en ese territorio fueron las que venían de la gente que milita esa agenda. Ni Alberto Fernández ni Mauricio Macri ni Lavagna los tomaron. Solo lo hizo Manuela Castiñeira (Nuevo Mas), que casi es su identidad de candidata. Victoria Donda propuso la creación del Ministerio de las Mujeres. Pero estos temas no se transformaron en un eje o debate de la campaña”, agregó Quevedo, en sintonía con el monitoreo de ELA.

--¿Por qué cree que fueron temas soslayados? --le preguntó este diario

--Porque nadie quiso jugar en ese tema fuerte. Si tomás esa bandera de llevar al Congreso la Ley de Interrupción del Embarazo, te definís fuerte y ninguno quiso.

Solo dos de los cinco frentes electorales (Nuevo MAS y FIT) hacen una referencia explícita en sus plataformas electorales a la necesidad de legalizar el aborto, mientras que el Frente de Todos se compromete a “garantizar la autonomía reproductiva de las personas gestantes”, señala el relevamiento de ELA. En distintas entrevistas, Alberto Fernández consideró que se debe avanzar primero con la despenalización del aborto, y luego con la legalización. Por otro lado, es conocida la posición en contra de Mauricio Macri y de Roberto Lavagna, pero en sus listas tienen pañuelos verdes. Fernández recibió el apoyo de gobernadores antiderechos como Juan Manzur, de Tucumán, que fue reelecto.

Pañuelos

¿Cómo juega en el electorado el posicionamiento de los precandidatos a presidentes? Según observa la analista de opinión pública Shila Vilker, directora de la consultora Tres Punto Zero, “dos tercios de la población” no se sienten identificados con ningún pañuelo y no cambiarían su voto según el posicionamiento a favor o en contra de algún candidato. “El debate por la legalización del aborto no es un tema que ocupe un lugar fundamental en su evaluación política. Básicamente, no es una cuestión que rija y ordene su voto. Esto no significa que no tengan una opinión al respecto; sino que no cambiarían su voto por la posición que tenga el candidato que han elegido o podrían elegir”, señaló a Página/12.

--¿Qué pasa con el otro tercio? --le preguntó este diario.

--Aparecen dos tendencias marcadas: por un lado, la legalización del aborto es un driver electoral en particular entre los jóvenes de los sectores urbanos --por supuesto más para las mujeres que para los hombres-- que bregan por la aprobación de la ley. Lo segundo es la llamativa utilización política de la consigna entre quienes rechazan la ley. Quizás, contrariamente a lo esperado, son los pañuelos celestes los que hasta ahora han levantado con éxito en las urnas la bandera de las dos vidas. #ConAbortoNoTeVoto ilustra perfectamente el lugar central que los sectores celestes más duros le están dando a la temática. Ese fue el caso de Amalia Granata, elegida diputada por la provincia de Santa Fe por el partido Unite por la Familia y la Vida. A Granata la votaron 276.341 personas bajo la única consigna de rechazar el proyecto de legalización del aborto. Tal vez en la arena porteña es donde el pañuelo verde se agite a través de figuras como la candidata a legisladora porteña Ofelia Fernández en el Frente de Todos o la candidata a senadora Guadaliupe Tagliaferri por Juntos por el Cambio. Son candidatas que, dentro de espacios con propuestas más amplias, buscan representar el compromiso con la legalización del aborto y de ese modo canalizar una demanda genuina y espontánea.

Agenda de género

Desde 2011, ELA hace un ejercicio de monitoreo que busca determinar en qué medida se incorpora una mirada feminista en las propuestas y discursos de las diferentes candidaturas, considerando diversas fuentes, explicó Lucía Martelotte, coordinadora del equipo que llevó adelante el relevamiento, en este caso, sobre las plataformas electorales y spots de campaña. La ONG realizó el análisis a partir de las medidas que se presentan en cinco ejes que consideran centrales para la igualdad de género: acceso a la justicia; paridad y participación política; violencias machistas; derechos sexuales y reproductivos; y autonomía económica. Solo el Frente para Todos tiene propuestas en su plataforma para cada uno de esos temas. Sin embargo, no hizo hincapié en ninguno de ellos en sus spots de campaña. Nuevo Mas y el FIT desarrollan la agenda feminista con excepción del eje de acceso a la justicia y paridad y participación política, pero fueron las fuerzas que les dieron más lugar a estos temas en sus spots. Una de las piezas publicitarias del FIT, incluso, se titula “Spot Mujer” y se refiere en su totalidad a la lucha de las mujeres, donde se resaltan “la importancia de la lucha por el aborto legal, la necesidad de implementar correctamente la Ley de Educación Sexual Integral y la lucha contra la violencia de género”, destaca el informe de ELA.

Otras demandas

De acuerdo con los relevamientos desarrollados por ELA en anteriores contiendas electorales, las referencias a medidas para abordar y prevenir las violencias machistas están presentes de manera bastante generalizada desde 2015 cuando el movimiento Ni Una Menos hizo masivo el reclamo contra los femicidios y las violencias de género. Sin embargo, “no fue posible identificar medidas para erradicar este tipo de violencias en las plataformas enunciadas por dos de las tres fuerzas más competitivas: Juntos por el Cambio y Consenso Federal 2030”, apuntó Martelotte.

En lo que respecta a la autonomía económica se identificaron propuestas para el FIT, el Nuevo MAS y el Frente de Todos. En el caso del primero, se centran en la igualdad salarial mientras que en las otras dos fuerzas se incorpora otro tipo de propuestas vinculadas con la necesidad de redistribuir las tareas de cuidado y la eliminación de la violencia y el acoso laboral. Como en monitoreos anteriores de ELA, en el eje de “Acceso a la justicia” se encontraron escasas medidas, presentes en una sola de las fuerzas analizadas (Frente para Todos).

Ninguno de estos temas se instaló como tema de debate electoral, a pesar del crecimiento del movimiento de mujeres como actor político en los últimos años. La agenda LGBTTIQ estuvo aún más ausente.

--El tema económico tuvo bastante relevancia en el contexto electoral, pero no se ha visto atravesado por la perspectiva de género: las mujeres tienen mayores niveles de desempleo, de precarización laboral y ganan menos y no ha sido un eje explorado y explotado en la campaña --advirtió Mercedes D’Alessandro, de Economía Feminista.

Indecisas

Un dato significativo que aporta Vilker, de la consultora Tres Punto Zero, es que como en otras elecciones, las mujeres duplican (e incluso más) a los hombres indecisos.

--¿A qué factor adjudica esta diferencia? --le preguntó este diario.

--Este porcentaje mayor de mujeres indecisas en relación con los hombres puede explicarse por la conformación tradicional de los ámbitos público y privado, atribuidos a hombres y mujeres respectivamente. Si bien el sufragio femenino, el cupo y más recientemente la paridad han tendido a equilibrar desigualdades, todavía son más las mujeres con menor interés en la cosa pública.