Norma McCorvey, la mujer tras el seudónimo "Jane Roe" del caso judicial que abrió el camino a la despenalización del aborto en Estados Unidos, falleció a los 69 años de un paro cardíaco en un centro para adultos mayores, en Texas. La noticia fue confirmada por Joshua Prager, un periodista que está trabajando en un libro sobre el caso "Roe vs. Wade", esa batalla legal librada en 1973 ante la Corte Suprema norteamericana.
El fallo que dos abogadas jóvenes obtuvieron en nombre de McCorvey/Roe cuando procuraban sentar precedentes en derechos reproductivos habilitó el acceso de millones de mujeres de todos los Estados norteamericanos a la interrupción legal del embarazo, aunque luego decisiones de las distintas jurisdicciones y leyes federales fueron acotando la práctica.
A los 22 años, McCorvey se había casado (a los 16), divorciado y dado a luz dos veces y entregado en adopción a uno de sus niños, mientras su madre criaba al restante; entonces quedó embarazada nuevamente. Trabajaba en tareas de limpieza doméstica y ganaba muy poco dinero. En 1970, las abogadas de Dallas Linda Coffee y Sarah Weddington tomaron su caso para batallar por el acceso al aborto en Texas, que sólo permitía la interrupción del embarazo si había peligro para la vida de la gestante. Con cinco meses de gestación, McCorvey accedió a ser representada por ellas, aunque décadas después, convertida en estandarte del movimiento pro-vida norteamericano, dijo que no había leído ninguno de los papeles que había firmado, desesperada como estaba por acceder al aborto.
Mientras el proceso judicial se estancaba, dio a luz a una niña que dio en adopción. Nunca testificó ante ningún tribunal en los tres años que siguieron, y durante los cuales el caso se hizo camino hasta al Corte Suprema. El 22 de enero de 1973, el máximo tribunal norteamericano resolvió por 7 votos a favor y 2 en contra que el acceso al aborto en el primer trimestre del embarazo formaba parte del derecho a la privacidad protegido por la Constitución.