El radicalismo salió aún más herido de las PASO. Sin candidato a presidente para una interna ni vicepresidente en la fórmula con Macri, la alianza fundada por la UCR perdió en las tres provincias que cuentan con gobernadores radicales. La derrota más dura fue la de Mendoza, donde gobierna el presidente del Comité Nacional, Alfredo Cornejo, quien también fue derrotado a la cabeza de la lista de precandidatos a la Cámara de Diputados.
"Estoy seguro que muchos mendocinos que valoran nuestra gestión, quizás no están del todo conformes con la gestión nacional, y han preferido optar por la oposición", analizaba anoche Cornejo tras reconocer la victoria del Frente de Todos en la categoría presidencial por 40,4 por ciento sobre 37,33 por ciento cosechado por Macri.
En 2015, Mendoza había sido la única provincia en la que la alianza Cambienos se había impuesto fuera de la Ciudad de Buenos Aires. En aquella interna, el mendocino Ernesto Sanz, compitió con Macri por la precandidatura presidencial en representación del radicalismo. Algo en lo que la UCR no consiguió torcer el brazo a la mesa chica del PRO, tras cuatro año.
Reclamos desde Mendoza
"Volvemos a ratificar la necesidad de que Mendoza tenga una agenda electoral propia en los cargos municipales y provinciales, y distinta a la agenda electoral nacional", señalaba anoche Cornejo la decisión de separar las elecciones provinciales de las nacionales. En Mendoza se renovará gobernador el 29 de septiembre.
Sin embargo, Cornejo sufrió una derrota ayer en carne propia, ya que la lista para diputados nacionales Cambia Mendoza, que él encabeza como candidato, también quedó debajo del Frente Todos por escasa diferencia: 39,96 por ciento a 39,10 por ciento.
"Como en 2015, estamos para representar a los que quieren un país serio y, cuando sumemos en una elección, nos llevaremos la sorpresa de que son más de la mitad de los argentinos los que quieren este modelo", pronosticaba un Cornejo más esperanzado hace solo un mes en el cónclave de Juntos por el Cambio en Parque Norte .
Derrotas en Jujuy y Corrientes
El gobernador reelecto de Jujuy, Gerardo Morales, —otro aliado que desdobló las elecciones para no ser arrastrado por la mala imagen de Macri — tampoco pudo aportar para mejorar la performance nacional de la alianza. En la provincia del norte, la victoria del Frente de Todos fue por el 46 por ciento de los votos sobre un 29 por ciento para la fórmula de Macri con Pichetto.
Tras cuatro años de gobierno de Morales, primer vicepresidente del Comité Nacional radical, el mapa para la alianza no se modificó de lo obtenido en las PASO 2015 , donde el Frente para la Victoria había cosechado el 41 por ciento de los votos y Cambiemos el 23,2 por ciento. Solo se acrecentó la polarización, que macristas y radicales habían prometido terminar.
"Lo más importante con estas elecciones es conocer la voluntad de los ciudadanos, porque es cuando el gobierno o ratifica o cambia el rumbo", consideró el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés. El radical no se jugaba su gobernación, que está desfasada del calendario nacional, pero sí las candidaturas a diputados nacionales.
Para el binomio presidencial, la derrota en Corrientes fue del 53 por ciento para Fernández-Fernández a veinte puntos (33,14 por ciento) de Juntos por el Cambio. Para los precandidato a la Cámara baja de ECO + Juntos por el Cambio, la suerte fue similar.
"Hoy las provincias reciben los recursos que les corresponden. Volvimos a tener dignidad con este Gobierno. Decidimos apostar al federalismo y efectivamente cambiamos", celebraba Valdés en el encuentro de Parque Norte , acompañado por Cornejo y la también derrota gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal .
Adolfo tampoco sumó
El volantazo de la alianza gobernante para las PASO fue la decisión de abrir el juego al peronismo. La decisión se tradujo en la incorporación como candidato a vicepresidente a Miguel Pichetto, cancelando el reclamo radical de poner un boina blanca en ese lugar. Pichetto había prometido sumar otros sectores del peronismo, pero solo consiguió al ex gobernador y senador puntano Adolfo Rodríguez Saá .
En las PASO 2015, había conseguido una rotunda victoria por el 45 por ciento de los votos. En segundo lugar, con el 30,1 por ciento había quedado Cambiemos. El Frente para la Victoria obtuvo un magro 19,6 por ciento. Ayer, el Frente de Todos se impuso en la provincia por el 44,23 por ciento de los votos, a 10 puntos de distancia de los sufragios obtenidos por la fórmula presidencial Macri-Pichetto.