El candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández, se refirió en diálogo con Página/12 a los debates electorales que deberían realizarse el 13 y 20 de octubre, de acuerdo a la ley sancionada por el Congreso en 2016. Consideró que Mauricio Macri está "en una situación de mucha debilidad" para debatir y dijo que la obligatoriedad es "un disparate". Pero aclaró: "Si quieren debatir, yo debato".
"Terminan teniendo que asumir un debate con una debilidad electoral profunda y con una debilidad política mayor", cuestionó Fernández al referirse a la iniciativa del macrismo que dispuso que sean obligatorios los debates presidenciales. "La obligación de hacer debates por ley es un disparate", agregó.
El candidato de Todos añadió que "es casi perverso" hacer debatir a Macri porque "está en una situación de mucha debilidad también para enfrentar un debate". "Si quieren debatir, yo debato. Si hay una ley que lo dice, yo la cumplo", advirtió.
Los debates presidenciales quedaron instituidos tras la última reforma al Código Electoral, que, por iniciativa del macrismo, determinó su obligatoriedad. Incluso se determinó que haya sanciones a los candidatos que no participen del debate, a través de la quita de espacios de publicidad. De hecho, también se promovió que esté la silla vacía del candidato que no asista.