¿Qué medidas está adoptando Coca-Cola en vías de la preocupación social por el tema medioambiental?
- Uno de los principales temas en los que estamos trabajando son los desechos de envases post-consumo. Los datos son contundentes: cada minuto se compra 1 millón de botellas de plástico en todo el mundo y la mitad de ellas termina como residuo. Tenemos una iniciativa global que consiste en que todos nuestros envases estén hechos de materiales reciclables para el 2025, que nuestros envases contengan un 50 por ciento de material reciclado para el 2030 y que se recupere y recicle el equivalente al 100 por ciento de los envases que ponemos en el mercado para el 2030. En Argentina, todos nuestros envases son reciclables y ya tienen en promedio un 11 por ciento de contenido reciclado. El recupero de envases para reciclado esta alrededor del 20-25 por ciento a nivel nacional. Estamos trabajando con comunidades locales, ONG’s, autoridades gubernamentales y miembros de la industria con el foco puesto en esas metas. Una de las formas que en Coca-Cola entendemos que podemos aportar a robustecer la industria del reciclaje es convirtiéndonos en activos compradores de materiales reciclados.
¿Qué lugar ocupan en esta estrategia los envases retornables?
- La retornabilidad es un factor fundamental para lograr nuestras metas. Por eso estamos impulsando el uso de envases retornables de plástico y vidrio. Se trata de una opción más económica para las personas, que también contribuyen al cuidado del ambiente al reutilizar y reducir, dos de los ejes clave de la economía circular. Un envase de plástico retornable –en promedio- puede ser reutilizado más de 10 veces. Esto reduce un 80 por ciento el consumo de material PET virgen al mismo tiempo que disminuye significativamente la huella de carbono. Además, cada botella retornable son 12 envases menos que se ponen en el mercado. Al culminar su vida útil, los envases retornables son descartados en la planta productora y destinados a reciclado.
¿Cómo se viene adaptando la marca a otra preocupación social como es la mejora en la calidad alimenticia?
- Somos conscientes de que reducir el consumo de azúcar en alimentos y bebidas es cada vez más importante para muchas personas. Si bien el azúcar ingerida en cantidades moderadas no constituye un problema, coincidimos en que si su ingesta excesiva deja de ser saludable. Por eso nos transformamos. Estamos dedicados a re-elaborar muchas de nuestras recetas para reducir la cantidad de azúcar de nuestros productos y mantener, al mismo tiempo, los sabores que las personas eligen. Sólo durante 2018, redujimos el azúcar en más de 400 bebidas en el mundo. El 30 por ciento de nuestro portafolio de 3900 bebidas tiene opciones sin azúcar o bajas en azúcar. En la Argentina, más del 45 por ciento del portafolio corresponde a bebidas sin azúcar o bajas en calorías.
¿Cómo definiría la situación actual del mercado local y las perspectivas a corto y mediano plazo?
- Coca-Cola tiene 133 años de historia y en Argentina está hace 76 años. En todo este tiempo hemos atravesado y acompañado distintos momentos y así seguirá siendo, porque nuestro compromiso con el país es a largo plazo. Hoy, la coyuntura local es desafiante, no solo por la cuestión económica sino, principalmente, por situaciones de competencia desleal por evasión impositiva.