El sector empresario continúa abriendo el paraguas con respecto al pago del bono de fin de año mediante el cual el Gobierno desactivó el paro general de la CGT. Ayer la CAME difundió un relevamiento interno cuyo resultado fue que sólo el 37,4 por ciento prevé cumplir con este beneficio “debido a la difícil situación económica que atraviesa la economía y particularmente la industria”. El vicepresidente de la UIA y titular de la Copal, Daniel Funes de Rioja, advirtió que “la situación del pago del bono de fin de año hay que verla sector por sector, realidad por realidad, ya que hay restricciones económicas, productivas y financieras”.
CAME realizó la encuesta entre 350 industrias pymes de todo el país, de las cuales sólo el 37,4 por ciento anticipó que pagará el bono, mientras que el 42,3 por ciento aseguró que no lo abonará y el 20 por ciento restante “está evaluando la situación”. A pesar de esos números, la entidad aclaró que “si bien casi el 90 por ciento de las empresas relevadas desearían pagar el beneficio para mejorar la situación de ingresos de sus empleados y recompensar el esfuerzo del trabajador, pocas pueden hacerlo”. Entre las razones que las empresas mencionan para excusarse está “la paralización de las ventas que frenó la producción, que se nota sobre todo en empresas pymes de sectores como máquinas y herramientas, material de transporte, calzados o textiles que vienen muy afectadas por la coyuntura”.
El impacto del bono sobre el universo de los trabajadores se encamina a ser bajo. Las cámaras de la construcción y de comercio sostienen que el cierre de la paritaria en el orden del 39 por ciento anual los libera de la responsabilidad del bono, mientras que los textiles anticiparon que no pueden pagarlo. En tanto, Funes de Rioja dijo que “hay que sentarse y conversarlo con los dirigentes sindicales, el problema de la Argentina no está en los trabajadores incluidos en los convenios colectivos, porque debajo de ellos están los informales y los que están en la pobreza”. “Hay predisposición para defender el empleo y defender el ingreso, pero para eso hay que defender la producción”, deslizó.
El bono, para pocos
Resistencia empresaria
Este artículo fue publicado originalmente el día 27 de octubre de 2016