El Ministerio de Trabajo decidió redoblar la apuesta luego de que debiera aceptar la paritaria de los bancarios con un porcentaje superior al techo del 20 por ciento. Los funcionarios PRO presentaron un pedido de juicio político contra los dos camaristas del fuero laboral que avalaron la paritaria de la Asociación Bancaria. Desde ese gremio, repudiaron la decisión y consideraron que se trata de "un hecho de inusitada gravedad institucional que merece nuestro repudio".
La paritaria de los bancarios se convirtió en un caso testigo en la puja del oficialismo porque los sindicatos sigan las metas del inflación que plantea el Gobierno. Luego de que intentaron no homologar el acuerdo, cuando el 80 por ciento de las patronales lo firmaban, el sindicato se presentó ante la Justicia y obtuvo un fallo favorable. Lo firmó una sala en la feria judicial, integrada por los camaristas Enrique Arias Gibert y Graciela Marino. En su sentencia, le indicaron al Gobierno que debía abstenerse de intervenir en la paritaria y le dieron la razón al gremio.
Finalmente, luego de resistirse, los funcionarios debieron firmar la paritaria de los bancarios, el mismo día que el presidente Mauricio Macri daba una conferencia de prensa por el Correo y las jubilaciones y recomendaba paritarias por debajo del 20 por ciento. "Techos tienen las casas. Los trabajadores tenemos paritarias", afirmó ese día el titular de la Bancaria, Sergio Palazzo.
Tras la derrota, el Ministerio de Trabajo fue por más: presentó un pedido de juicio político ante el Consejo de la Magistratura en el que pidió su destitución bajo los cargos de "mal desempeño, falta de idoneidad, negligencia grave, arbitrariedad, falta de imparcialidad e incumplimiento de la Constitución nacional". Todo esto, basado en el contenido del fallo.
Desde la Asociación Bancaria manifestaron su solidaridad con los jueces y advirtieron que sufren "un hostigamiento que violenta el orden constitucional".