El ex canciller brasileño Celso Amorim planteó la necesidad de conseguir la liberación del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva para que haya “un verdadero diálogo nacional” y estimó que “gracias a la presión internacional” se puede lograr. En esa línea, destacó que ve como positivo para toda la región latinoamericana el posible triunfo de Alberto Fernández en el país. "Con Argentina somos hermanos, hay influencia recíproca y tenemos esperanza de que la elección de Alberto tendrá influencia en Brasil”, enfatizó.
Amorim, exministro de Relaciones Exteriores durante los dos gobiernos de Lula, habló con AM 750 y dijo que “Brasil está muy mal” por la crisis económica y el desastre ecológico en la Amazonia, aunque subrayó que “lo más escandaloso es que el líder más popular esté en prisión sin ninguna acusación verdaderamente fundada”. En ese sentido, recalcó que “la Justicia está cuestionada” y puso el acento en el juez Sergio Moro: “Cuando aceptó ser ministro de Justicia se vio que no era un juez independiente”.
Sobre la situación del país expresó que “hay 13 millones de desocupados, una cifra que puede ser mayor por la subocupación”. Criticó que “no hay derechos laborales” y la caída en recesión de la economía, en un contexto en el que el ministro de Economía, Paulo Guedes, “quiere privatizar todo, hasta Petrobras”. También criticó a Bolsonaro por su manejo del desastre ambiental en el Amazonas. “Ha tratado con mucha agresividad a los líderes mundiales y con lo de la Amazonia temo que se nos cierren las exportaciones”.
Para el ex canciller, la clave pasa por la libertad de Lula. “Con Lula se podría dar un verdadero diálogo nacional. Ahora solamente hablan la derecha y la extrema derecha, los más ricos y Bolsonaro. Con Lula sería distinto”. Dijo ser “optimista” para la libertad del líder del PT, cuyo encarcelamiento “fue para sacarlo de las elecciones” y que “hay presión internacional sin necesidad de hacer campaña”.
Sobre los apoyos externos aludió a Alberto Fernández, con quien visitó a Lula en la cárcel a comienzos de julio. “Lula se puso contento de verlo, él está bien y da entrevistas", contó sobre el momento del encuentro.
Amorim puntualizó que “con Lula libre se podrían unir no solamente los progresistas, también , los de centro”. En ese sentido, no dudó en decir que “a corto plazo hay dos cosas importantes: la elección de Alberto y la libertad de Lula”, que tendrían impacto a nivel regional.