El argentino Damián Steiner, árbitro de la última final de Wimbledon entre Novak Djokovic y Roger Federer, fue despedido este martes por la Asociación de Tenistas Profesionales por dar una serie de entrevistas a medios nacionales, "violando" las políticas de la ATP.
"Mucho de lo que dijo Steiner en sus entrevistas fue una violación directa a los protocolos donde se aclara que los oficiales deben abstenerse de discutir jugadas específicas, partidos, jugadores, otros oficiales o reglas del juego, por el interés de mantener imparcialidad todo el tiempo", informó la ATP de manera oficial al diario estadounidense The New York Times.
Steiner, de 44 años, dio entrevistas a Radio Continental y un podcast tras la final del 14 de julio donde el serbio se impuso por 7-6 (5), 1-6, 7-6 (4), 4-6 y 13-12 (3) al suizo.
Según citó la ATP para ejemplificar las "violaciones", el umpire se había referido a cómo "creía" que "Federer iba a ganar Wimbledon cuando ya estaba dos match points arriba en el quinto set" durante la charla radial. "Fue un partido largo, demandante. Había mucho en juego y uno intenta pasar lo más desaparcebido posible en esos momentos", había declarado Steiner en aquel intercambio.
Por el momento, la Asociación Argentina de Tenis (AAT) no se expresó sobre la situación de Steiner, aunque sí lo hicieron algunos jugadores del circuito, como el chascomusense Carlos Berlocq, quien calificó al árbitro como "justo y correcto" al brindarle su "apoyo".
Además, el estadounidense John Isner, número 14 del ranking mundial, consideró que Steiner es un "fantástico umpire" y que toda la situación le parece "absurda".