Desde Santa Fe

En una década de juicios de lesa humanidad, es la primera vez que el Tribunal Oral de Santa Fe dicta cuatro cadenas perpetuas. Lo hizo ayer en el veredicto por la masacre de Ituzaingó y Las Heras: condenó a tres militares: el coronel Ramón Abel Recio, el sargento Jorge Alberto Balla y el cabo Luis Alfredo Gómez y a un ex oficial de inteligencia del D-2 Oscar Cayetano Valdez a prisión perpetua por los "homicidios calificados por alevosía" de cuatro militantes en resistencia a la dictadura: Jorge Piotti, su pareja Ileana Gómez y los compañeros de ambos, Osvaldo Pascual Ziccardi y Carlos Mario Frigerio y a 12 años de prisión a dos agentes del Comando Radioeléctrico Ricardo Brunel y Rolando Martínez como "partícipes secundarios".

"Se hizo justicia", dijo el hijo menor de Piotti, Jorge, que era un bebé de 45 días cuando sobrevivió con su hermano, Mariano, de dos años y medio, a un ataque del Ejército al edificio donde vivían con sus padres. Los dos se abrazaron al escuchar la sentencia que destapa la trama del operativo que durante 42 años ocultó las ejecuciones bajo la propaganda del enfrentamiento. Mariano no podía hablar por la emoción. Jorge hizo un esfuerzo: la sentencia le devuelve también su identidad porque ordena restituirle el apellido de su padre. El y su madre, Ileana Gómez, "eran dos perseguidos políticos porque resistieron a una dictadura genocida, ilegal", recordó. "Hoy se ha pronunciado la justicia argentina", siguió aquel niño que ayer estaba en las puertas del Tribunal con sus hijos, los nietos de Piotti. "Y ese pronunciamiento tiene el carácter de verdad, de las cosas que pasaron". "Después de tantos años de mentiras, sobre todo en Santa Fe, espero que esta sentencia permita tomar conciencia" de lo que ocurrió.

El coronel Recio condenado a perpetua.

El veredicto se conoció al mediodía. Es un fallo unánime del presidente del Tribunal, Luciano Lauría, que lo leyó, y de sus colegas de Rosario, Otmar Paulucci y Mario Gambacorta. Por la masacre de Ituzaingó y Las Heras, condenó a seis de los nueve imputados y absolvió a los otros tres, que también operaban en el Comando Radioeléctrico: Abel Romero, Rodolfo Reible, y Carlos Albornoz, este último por el beneficio de la duda.

"Se hizo justicia", dijo Jorge, que era un bebé de 45 días cuando sobrevivió a un ataque del Ejército al edificio donde vivía con sus padres.

El Tribunal condenó también a 15 años de prisión a otros tres policías: Raúl Giménez, Rubén Vázquez y Luis Alberto Bellini. Al primero por el "homicidio" de dos militantes: Nora Meurzet y Antonio "Pelusa" Mendicute, el 3 de enero de 1977 y a los otros dos por el "homicidio" Luis Alberto Fadil, Alicia Beatriz Ramírez y Mario Oreste Galuppo, el 6 de octubre de 1976.

En síntesis, de los doce imputados en el juicio, nueve fueron condenados: cuatro a perpetua (Recio, Balla, Gómez y Valdez), tres a 15 años de prisión (Giménez, Vázquez y Bellini), dos a 12 años (Brunel y Martínez) y tres absueltos (Romero, Reible y Albornoz). El fiscal Martín Suárez Faisal había pedido prisión perpetua para siete de ellos y penas de 16 a 20 años para los demás, mientras que las abogadas querellantes Lucila Puyol y Soledad Sánchez Jeanney la máxima pena para todos lo que llegaron al banquillo.

Las abogadas de Hijos -que representaron también a las familias de Piotti y Gómez- se mostraron conformes con el veredicto. "Estamos muy satisfechas por las condenas a prisión perpetua por estos hechos gravísimos que sucedieron en Santa Fe", dijo Puyol. "Lo más importante es que se declaró a los nueve militantes como víctimas del terrorismo de estado, que se probó que acá hubo un plan sistemático de persecución y exterminio de quienes resistían a la dictadura y que el Area 212 y el Comando Radioeléctrico participaron en ese plan. Esta sentencia tiene el valor de reivindicar a los militantes que resistieron la dictadura cívico militar y eclesiástica".

Entre la muchedumbre que se convocó en las puertas del Tribunal, estaban también una hermana de Piotti, Marilín, su esposo Cecilio Manuel Salguero y el hermano mayor de Ileana Gómez, Héctor. "Esperamos 42 años para que se haga justicia y demostramos que esto fue un genocidio, que acá hubo una tiranía que tenía la suma del poder público e implementó el terrorismo de estado para impedir que el pueblo argentino se libere de la opresión", dijo Salguero.