Desde Roma
El papa Francisco partirá este 4 de septiembre a África para visitar tres países, Mozambique, Madagascar y la República de Mauricio. Llevará a cabo así su sexto viaje al exterior de 2019, después de haber visitado Panamá en enero, Emiratos Árabes Unidos en febrero, Marruecos en marzo, Bulgaria y Macedonia del Norte en mayo y Rumania en junio.
Se trata del viaje número 31 de Francisco fuera de Italia. Desde el comienzo de su pontificado en 2013, visitó 42 países de todo el mundo, 8 de éstos de América Latina. Pero nunca decidió ir a Argentina.
En Mozambique, Madagascar y Mauricio, tres países al sureste de África y dos de ellos islas, estará seis días, retornando el 10 de setiembre a Roma. En los días siguientes de setiembre tendrá mucho que hacer en el Vaticano, dado que del 6 al 27 de octubre está programado el Sínodo Mundial sobre el Amazonas, al que asistirán obispos y cardenales de todo el mundo, además de, muy probablemente, indígenas y expertos amazónicos. Un evento sin precedentes en la historia de la Iglesia y que hoy adquiere aún más importancia después de los incendios masivos que están destruyendo el pulmón verde del mundo y las polémicas desatadas en torno a cómo el mundo y Brasil en particular, están abordando el problema.
Ecologista desde el principio de su papado, Francisco lo demostró dedicando su primera encíclica al tema ecológico. En “Laudato si”, publicada en 2015, el papa mencionó a San Francisco de Asís - que además de impulsar la pobreza en la Iglesia era un verdadero ecologista del Medioevo- y habló de la "hermana tierra", “nuestra casa común”, que protesta por todo el mal que los hombres le provocan a causa del uso irresponsables de los bienes que Dios les ha puesto a disposición.
No es la primera vez que Francisco visita países africanos. Estuvo en 2015 en Kenia, Uganda y la República Centroafricana y en 2017 en Egipto y Marruecos.
En los tres países de este viaje, que han pasado este año por una dura crisis a causa de dos importantes ciclones, el papa Francisco se encontrará con una iglesia católica de vieja data ya que sus fundamentos se remontan a fines del 1400 pero también al 1600. Una iglesia católica ligada fundamentalmente a la actividad misionaria de congregaciones como los Jesuitas -congregación a la que pertenece Francisco- , los Dominicanos y los lazaristas de la Congregación de la Misión.
En Mozambique, un país con poco más de 30 millones de habitantes, la Iglesia católica cuenta con unos 6 millones de bautizados. Otras religiones difundidas en el país son el Islam y las iglesias cristianas pentecostales. Francisco llegará a Maputo, la capital, en la tarde del 4 de septiembre, donde además de encontrarse como es normal con las autoridades locales, se encontrará con jóvenes de distintas religiones pero también visitará a los enfermos de un hospital en la periferia de Maputo, en un barrio donde la organización católica Sant’Egidio de Roma, lucha desde hace años contra el Sida.
El sábado 7 viajará a Antananarivo, capital de la República de Madagascar, un país tesoro de la biodiversidad, pleno de animales y plantas que raramente existen en otras tierras, donde la mayoría de la población es cristiana. Además de los encuentros formales con las autoridades locales, visitará el monasterio de las monjas carmelitas descalzas y luego, entre otras actividades, visitará la tumba de Victoire Rasoamanarivo, un símbolo para los católicos locales. Originaria de Madagascar, Victoire Rasoamanarivo se hizo católica a los 15 años y desde entonces destinó su vida a ayudar a los pobres y a los enfermos. Fue beatificada por Juan Pablo I cuando éste visitó la isla en 1989.
El 9 estará en la República de Mauricio, una pequeña isla del océano Indico, frente a Madagascar, a donde la Iglesia católica llegó en el siglo XVII con los jesuitas que allí celebraron la primera misa en 1616. Aquí el catolicismo es también la principal religión cristiana pero el hinduismo es la religión más difundida. Mauricio pasó a lo largo de la historia por manos de distintos colonizadores, desde los portugueses y holandeses, hasta los franceses e ingleses. Fue declarada independiente recién en 1968 y parte del Commonwealth británico (la asociación comercial y política que une a todas las ex colonias británicas) en 1992.
En Port Louis, capital de la isla, además de las actividades oficiales y el encuentro con los obispos, el programa incluye una visita privada al santuario de Padre Jacques Laval, un sacerdote y misionario francés que llegó a la isla Mauricio en el siglo XVII para convertir a los indígenas locales. Fue proclamado beato por Juan Pablo II en 1979.
Francisco vuelve a Roma el 10 de setiembre.