La Cámara Federal ratificó ayer al juez Claudio Bonadio al frente de la causa Los Sauces, es decir que el magistrado continuará con las indagatorias, incluyendo la de Máximo y Florencia Kirchner el 6 de marzo y la de Cristina Kirchner el 7. En Comodoro Py está muy extendido el rumor de que Bonadio podría ordenar la detención de la ex presidenta ya que diseñó una insólita acusación en la que se ubica a CFK y a todos los imputados como integrantes de una asociación ilícita destinada a lavar dinero proveniente de una supuesta coima por contratos de obra pública. Según Bonadio, la organización empezó a funcionar en 2003, seis años antes de la constitución de la sociedad Los Sauces.

El abogado de CFK, Carlos Alberto Beraldi, enumeró una larga serie de elementos para demostrar que existe una enemistad manifiesta de Bonadio en contra de la ex presidenta. 

  • Que el juez no permitía que la defensa saque fotocopias de la causa, un derecho elemental para poder estudiar una acusación. 
  • Que convocó a testigos sin notificar a las defensas, quitándoles el derecho de controlar la prueba y proponer preguntas.
  • Que realizó varios allanamientos sólo para que se hagan tasaciones, cuando ello no es necesario. Lo habitual es que una tasación se haga con planos de la propiedad y la opinión de tasadores.
  • Para hacer esos allanamientos, en los que no se buscaba documentación sino establecer el valor de una propiedad, no se notificaba a la defensa. 
  • Que Bonadio removió a las autoridades de Los Sauces y designó un interventor sin tener facultades para una medida de esa naturaleza.
  • Que hizo declaraciones públicas del estilo de “si aparezco suicidado busquen al asesino, porque yo no soy de ese estilo”, haciendo una tácita referencia al caso de la muerte de Alberto Nisman y dirigiéndole una virtual acusación de homicidio al gobierno de CFK.
  • En la causa conocida como dólar-futuro sobreseyó a los funcionarios del PRO que hicieron enormes ganancias con esa operatoria. El expediente sobre las ganancias en esa maniobra es instruido por el juez Sergio Torres, es decir que Bonadio no debía ni opinar.
  • En su momento, Cristina pidió el juicio político de Bonadio. El Código Procesal prohíbe expresamente que un magistrado actúe en una causa en la que está imputada una persona que lo acusó.
  • Es público y notorio que Bonadio ordenó una cantidad de allanamientos que se concretaron con una evidente cobertura mediática acordada de antemano. 

Pese a estos argumentos, dos camaristas, Jorge Ballestero y Leopoldo Bruglia, consideraron que no hay motivo para apartar a Bonadio porque son polémicas sobre la instrucción en una causa y no evidencian la llamada enemistad manifiesta. El otro camarista, Eduardo Freiler, votó por sacarlo. 

La causa Los Sauces es irregular. Bonadio fue expulsado por la Cámara Federal de la causa Hotesur por una larga serie de maniobras que cometió. Ese expediente incluía los alquileres de Los Sauces, al punto que 14 de los 33 puntos de pericia que se ordenaron se referían a Los Sauces. 

Después de que lo eyectaron, el magistrado y trató de entrar otra vez, pero por la ventana. Tomó entonces una denuncia de Margarita Stolbizer y argumentó que Hotesur y Los Sauces eran dos sociedades distintas. Sin embargo, en las indagatorias que tomó Bonadio mostró las cartas: formuló imputaciones que son exactamente iguales a las de Hotesur, que instruye Julián Ercolini. Dice que hubo irregularidades en la obra pública y que el dinero se lavó a través de alquileres de las propiedades de los Kirchner. Esto motivará un nuevo planteo de la defensa de CFK.

La defensa de la ex mandataria ya repitió que no hay delito alguno. Se trata de propiedades, oficinas, inmuebles, hoteles que los Kirchner compraron oficialmente y que alquilaron a Báez, a Cristóbal López y otros empresarios de Santa Cruz. Según sostiene Beraldi, todas las operaciones fueron bancarizadas, lo que explica que los empleados administrativos hayan declarado el lunes y el martes que depositaron cheques por orden de sus jefes. La confirmación de Bonadio no es un hecho aislado. El hostigamiento del anterior gobierno por parte aparato político-jurídico-mediático de Comodoro Py crea un clima de “dejar hacer” a Bonadio. Aunque las irregularidades son groseras, nadie quiere ponerle ningún límite. Más bien ocurre lo contrario: el rumor es que quieren ver si se lanza a detener a la ex mandataria, pese a la respuesta que podría tener una medida de esa naturaleza.