La Selección Argentina de básquet no sabe de imposibles y, tras el impresionante triunfo ante Serbia, la mira ya está puesta en el choque de este miércoles entre Estados Unidos y Francia, desde las 8 (por DeporTV), que definirá al rival de semifinales de los dirigidos por Sergio Hernández, el viernes desde las 9.
El equipo comandado por Gregg Popovich, que algunos dudan en denominarlo como Dream Team por la cantidad de jugadores jóvenes que hay en su plantel, no ha perdido en lo que va de torneo y, a excepción de un inverosímil duelo con Turquía en la segunda fecha (triunfo 93-92 en tiempo extra), ha tenido un andar casi arrollador: 88-67 a República Checa, 98-45 a Japón, 69-53 a la Grecia de Giannis Antetokounmpo y 89-73 a Brasil, para sacarlo del Mundial.
El líder del equipo dentro del parque es el base de Boston Kemba Walker, quien encabeza a los suyos en el rubro anotación (14,6 puntos por encuentro, con 60% en dobles y 41,4% en triples) y asistencias (6 por juego). Además, el escolta de Utah Donovan Mitchell (10,2 puntos, 4,4 asistencias y 4 rebotes) comanda la segunda unidad; el alero de Brooklyn Joe Harris es una garantía en el tiro de larga distancia (1,8/3,2 para 56% de acierto) y el interno de Indiana Myles Turner impone su presencia debajo del aro (8,4 puntos, 8 rebotes y 1,4 tapones).
La falta de renombre entre los estadounidenses es compensada por una exagerada capacidad atlética, una costumbre en lo equipos de este país, además potenciada por la juventud de su plantel, lo que lo hace un rival de temer tanto en ataque como defensa.
Así las cosas, los de Popovich vienen demoliendo a sus rivales en ambos costados de la cancha, sacando por 21,4 puntos de diferencia por juego, manteniendo a sus rivales con porcentajes de 37,3% en tiros (contra 44,3), imponiéndose en los rebotes por 47,2 (líderes del torneo en ese rubro) y forzando 14,6 pérdidas (contra 10,8 propias).
A pesar de que la historia obliga a poner a Estados Unidos -vigente bicampeón del torneo- como favorito, Francia no se queda atrás a la hora de candidatearse. Tras sumar triunfos sobre Alemania (78-74), Jordania (103-64), República Dominicana (90-56) y Lituania (78-75), los europeos cayeron en último choque de la segunda fase por lo justo ante Australia (98-100).
Francia es claramente dependiente de su "Big 3", compuesto por el gigante de 2,15 metros de Utah Rudy Gobert (11 puntos, 8,4 rebotes y 2,2 tapones), el base del Fenerbahce turco Nando De Colo (16,8 puntos, 52,9% en triples y 3,8 asistencias) y el escolta anotador de Orlando Evan Fournier (20,8 puntos, 42,9% en triples y 4 asistencias).
Entre los tres suman el 54% del total de los puntos de Francia, un equipo irregular que viene liderando el torneo en lanzamientos desde larga distancia (47,4% de efectividad en 19,4 intentos por juego) y que sufre en exceso en el rebote (último en el torneo con 31 por juego), justamente, la gran virtud de los norteamericanos.