Desde Dongguan, China

Todos los argentinos presentes en el Dongguan Basketball Center terminaron con lágrimas en los ojos. Hubo abrazos y festejos, pero sobre todo mucho asombro por lo que ocurrió en la noche de China dentro de la cancha, donde la Selección consiguió su pasaje para la semfinales del Mundial de Básquet dejando afuera de la pelea por 97-87 nada más y nada menos que la poderosa Serbia, que llegó a este país como gran favorito para ser campeona.

El equipo del Oveja Hernández jugó muy bien en ofensiva. Estuvo al frente casi todo el partido. Y en los momentos en que Serbia se venía, apareció la defensa. Facundo Campazzo con 18 puntos, 6 rebotes, 12 asistencias y 3 recuperos, fue la figura y el dueño absoluto del encuentro. La gran labor del base del Real Madrid fue incluso reconocida por el enternador del rival, Sasha Djordjevic. 

Durante el trámite del encuentro, Hernández apeló a la rotación del equipo dándoles minutos a los jugadores que arrancaron en el banco. Es que en el primer cuarto, sus dirigidos se llenaron de faltas (11 en total), con Scola, Delía y Gallizzi a la cabeza en los primeros 6 minutos  de juego.

"Estuve jugando con rotaciones cortas porque hay jugadores que no tienen mucha experiencia internacional”, explicó el entrenador, otro que  terminó el partido a pura emoción. Uno de los que debió entrar, aprovechando muy bien sus minutos, fue Agustín Cáffaro. "Lo hizo bien y nos dio una mano bárbara y pudimos de esa manera cuidar a Scola y Delia", explicó el Oveja al reconocer su buen desempeño en los momento calientes del juego. 

El que sigue destacándose por su defensa es Patricio Garino, otro que se mostró eufórico con la victoria: "Serbia es una potencia mundial y este trinufo para nosotros es una recompensa", sostuvo el alero del Baskonia, quien remarcó el "sacrificio hecho para mantener la compustura en la defensiva durante durante los 40 minutos". Su tarea no fue para nada fácil. Tuvo que marcar a Bogan Bogdanovich. "Me voy tranquilo, porque lo puse en situaciones muy incómodas en sus ofensivas", comentó Garino sobre la estrella de Serbia.

Con puntos importantes para sostener a Argentina arriba en el tanteador, Luca Vildoza,  comentó: "nadie daba un peso por nosotros en este mundial". Y luego remarcó la unión del equipo y el esfuerzo hecho durante dos meses de trabajo para lograr estar entre los cuatro mejores del mundo. "Obviamente, esto no queda acá. Tenemos una semifinal por delante. Vamor por la final", sostuvo el ex base de Quilmes. 

A los 3 minutos del primer cuarto, Delia tuvo que ir al banco con 2 faltas. Eso no le quitó el protagonismo defensivo que tuvo cuando estuvo en cancha. "Fue una victoria increíble. El equipo se preparó para jugar semifinales", comentó el interno, quien avisó que la cabeza de los integrantes del equipo nacional está la idea de "dar otro batacazo" para alcanzar la final. 

En la misma sintonía, el santiagueño Gabriel Deck reconoció: "Esta fue una gran victoria y no tenemos que conformarnos con eso". Desde el partido con Rusia, Tortuga juega con una molestia en el intercostal por un golpe que recibió. "Durante el partido me bloqueo por la emociones y me olvido de todo... Ahora va a empezar a doler", comentó.

El flamante jugador de Real Madrid, Nicolas Laprovíttola, al igual que sus eufóricos compañeros, que festejaron el triunfo con un gran revuelo dentro del vestuario, avisó que el equipo ya tiene la cabeza puesta en la semifinal, donde espera al ganador del partido entre el Estados Unidos y Francia: "Será el partido más importante de nuestras carreras. Hay que jugarlo con la misma concentración, la misma intensidad y la misma alegría con la que lo hicimos ante Serbia".