“Marx olvidó que los capitalistas sabían leer”.

Yuval N. Harari, Homo Deus

“El gorila es el único animal

que comete dos veces el mismo default”.

Rudy

Querido deudólar, estimado eurofaltante, valorada perjudicataria de la asignación universal de deuda por bisnieto; testigos desprotegidos del huracán Mauricio; reperfilados hacia la pobreza desde la ex clase media; contados y contadas con Liqui; ciudadanes a los que el Estado no les aplicó la vacuna anticarriólica a tiempo; esquiadores del fin de mes; sufrientes de todo tipo, color y género, a ustedes los arengo:

El Sumo Maurífice, otrora temido miembro de los Campeones de la Injusticia, ha perdido todos sus mauripoderes y apenas si se las ingenia para traernos un poco de pobreza a los argentinos.

Él sabe ningunearnos. Ahora decretó que se compre basura importada sin importar su toxicidad. Pero no le suma. De nada sirve que sus duranbarberos a cargo interinamente de la Subsecretaría de Alienación Nacional expliquen que “en verdad, él escuchó a la oposición cuando en las marchas le gritaban ‘Macri, basura’, y quiso satisfacerlas comprando, justamente, basura importada”.

Esa basura, sus amigos nos la venderán a buen precio en los basuroping centers. Y la tóxica es un poco más cara, ya que “lo caro atrae”, sobre todo a cierta clase media que se pasó varios años quejándose amargamente de lo poco que pagaba la luz y el gas, cosa que también remedió Mauri, en su afán de sumar voluntades.

Todo lo hace para sumar votos –porque nos quiere cerca, aunque no nos quiera–, pero todo lo que hace le resta votos. Y no se da cuenta de que lo que le gusta a él es, casi siempre, lo que no le gusta a la mayoría de la gente; lo que a él le gusta hacernos es lo que a nosotros no nos gusta que nos hagan. Por ejemplo: que nos invite a un asado y tengamos que llevar la carne, la bebida, el carbón, y además pagarles la comida a sus invitados buitres, o del Fondo.

Ahora que viene en picada, como cóndor en billete de 50 pesos, ya no sabe más qué hacer. Su mejor equipo de los últimos cincuenta años (ahora, yéndose a la B), le preguntó:

–¿Qué cuchuflito hacemos?

Y Mauri, con su habitual dominio de la lengua castellana, respondió:

–No sepo.

Alguno advirtió la errata y le dijo:

–Maurífice, está mal decir “no sepo”.

–¡Okey! Entonces, sepo.

Y así es como tenemos cepo. Pensándolo bien, es una buena recomendación, está bueno que nadie compre más de 10 mil dólares por mes, porque si alguien se entera, te los pueden afanar. ¡En serio! Ya pasó, hace 18 años, y no fue una mucama, ni un chofer, ni un taxista: se enteraron de que la gente tenía dólares en los bancos y, ¡puf!, se los llevaron de un decretazo a mano armada.

También nos podrían recomendar:

● Tener una prepaga low cost, así no te enfermás de nada grave

● No cambiar de caballo a mitad del vuelo

● Abrir restoranes, ya que en los comedores hay mucha gente

● Bajar los salarios, así, cuando los despiden, los asalariados pierden menos plata

● ¡Subir en barco al Aconcagua!, como dijimos hace unos días

O… que los votemos a ellos mismos, porque si no lo hacemos, se van a gastar medio PBI en psicoterapia.

Hasta la que viene, que ya viene.

@humoristarudy