Desde Beijing, China
No se pudo. La experiencia pesó más que la inconsciencia, que el ímpetu ganador de esta generación de jugadores que está llamada a hacer algo grande. El equipo nacional nunca pudo entrar en su ritmo arrollador de juego, o mejor dicho lo hizo pero en lapsos muy cortos y corriendo de atrás a España, que terminó llevándose el título con una clara victoria por 95-75 . Siempre se jugó a lo que quiso España. Los chicos intentaron en todo momento la remontada. Nunca se rindieron, nunca bajaron los brazos. Fueron al frente y perdieron en su ley. Lamentablemente, no fue su día. España jugó su mejor partido del mundial. Si, justo este domingo.
El seleccionado de España se proclamó campeón. La diferencia de 20 puntos en el marcador fue contundente. Estos jugadores no merecieron terminar el torneo de esta manera. Antes del partido, los mismos colegas españoles hablaban del excelente juego colectivo y la regularidad de esta Selección. Todos esperaban ver un juego a pura estrategia. Pero lo que se vió en la cancha del Wukesong Arena de Beijing fue cómo Sergio Scariolo, el DT italiano de España, pudo plasmar su plan perfecto. Prácticamente sin fisuras, España controló y dominó el trámite durante los 40 minutos. Dolió ver las caras de Luca Vildoza, Facundo Campazzo o al mismísimo Luis Scola, con bronca y desazón porque nada salió como se había pensado. Así es el juego.
La selección arribó a China con la ilusión de clasificarse a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y acaso meterse entre los ocho mejores del torneo. En ese momento, casi un mes atrás, muchos dudaron hasta dónde podía llegar este equipo, que fue de menor a mayor, despejando esas dudas y fijando algunas certezas. Con Scola y Campazzo en plenitud, los argentinos fueron enamorando al público chino en cada una de las ciudades donde jugaron. Por eso cada vez se veían aquí más camisetas y banderas argentinas.
"Nosotros no perdimos el oro, ganamos la plata", dijo Sergio Hernández en la zona mixta del estadio y agregó: "este equipo es espectacular, va a estar en mi corazón y en el corazón de los argentinos por las emociones increíbles que nos dío". Al hablar de la triste derrota de este domingo, el entrenador sostuvo: "Con Luis (Scola) tenemos más de estas cosas y somos más conscientes de donde llegamos", y continuó: "todos al final, dentro de dos o tres horas, vamos a tomar consciencia de lo que logramos". Para el Oveja, Scariolo le ganó el planteo táctico y en la ejecución del juego: "No hay excusas, no estábamos cansados, no estábamos satisfechos".
Junto a los españoles Ricky Rubio y Marc Gasol, el serbio Bogan Bogdanovic y Evan Fournier, Scola fue elegido en el quinteto ideal del Mundial. El capitán de la Selección felicitó a España: "fueron mejores, jugaron un mejor básquet que nosotros. Nos superaron". Dentro se su tristeza, el único integrante de la Generación Dorada dentro de este renovado plantel, calificó la derrota como "un momento duro" y coincidió con Hernández en que "con el correr de las horas" se iban a dar cuenta de lo que lograron aquí en China.
"El equipo jugó dos semanas espectaculares, fueron únicas", comentó el ex NBA, quien con sus 39 años y cinco mundiales, fue el motor que empujó a estos chicos hasta la final. "Creo que no tenemos que estar tristes", apuntó. Y al referirse al optimismo del grupo para llegar a la final, expresó: "solo un loco pensó que íbamos a estar acá".
Muy emocionado, Facundo Campazzo explicó que para llegar a la final hicieron muchas cosas buenas, que en este partido no se dieron: "no fue nuestro mejor partido, es difícil encontrar las palabras". Para el base del Madrid también hay que tomar dimensión de esta final. "No pudimos entrar en ningún momento en el juego". Desde la Americup 2017, este plantel se fue gestando hasta lo que es hoy: "hace varios años que estamos contruyendo esto".
Lo que se vio de la nueva generación de la Selección de básquetbol en China es la base sobre la que, sin dudas, este equipo seguirá construyendo el gran futuro que tiene por delante.