Luego de una espera que a sus fanáticos se les hizo interminable, el argentino Lionel Messi fue finalmente dado de alta y es uno de los convocados para el duelo de este martes, desde las 16 (por Fox Sports), entre el Barcelona y el Borussia Dortmund, por el debut del equipo blaugrana en la Champions League.

La vuelta de la figura del equipo de Ernesto Valverde -marginado del fútbol desde el 5 de agosto, tras lesionarse el sóleo de su pierna derecha- casi que se produce en el mejor momento para el conjunto catalán. Aunque es factible que Messi arranque desde el banco el encuentro con el conjunto alemán e ingrese al campo tan sólo unos minutos (luego de que el entrenador afirmara que esperará hasta antes del juego para anunciar si el rosarino será de la partida), su sola presencia entre el plantel que viajó este lunes a tierras germanas es un alivio para los catalanes.

Está claro que la herida que se abrió en el corazón de los seguidores del Barça en su último encuentro de Champions -por la revancha de las semifinales-, cuando el Liverpool les dio vuelta el 0-3, les metió cuatro goles y los eliminó con una goleada histórica, aún no ha cicatrizado del todo. Y menos aún luego del traspié que, ya sin el adorado 10 al inicio de esta nueva temporada, el actual campeón de la liga española tuvo en su debut en el torneo doméstico. Sobre todo, porque la caída por 0-1 ante el Athletic Bilbao fue un duro revés para los hinchas culés, acostumbrados a estrenarse con alegrías en el certamen, donde no sufrían una derrota en la primera jornada desde hacía 11 años.

Messi sumó este lunes su segundo entrenamiento con el plantel del equipo catalán. Y, aunque la idea es que vuelva de titular recién en el encuentro de Liga frente al Granada el sábado, es posible que Valverde lance al creativo argentino al campo frente al Borussia. De ser así, a 43 días de su lesión, concretaría su regreso: el último partido del diez con la camiseta azulgrana había sido la final de Copa del Rey, en la derrota ante el Valencia que lo dejó sin título. El rosarino disputó después la Copa América con la Selección, pero se lesionó antes de empezar la temporada en España.

Esa vuelta del ídolo coincide con más sed de victoria. Es que sacarse el sabor amargo de la caída ante el Liverpool le supondría al equipo de Valverde revertir una racha negativa de la cual no logra salir desde hace más de tres meses: su último triunfo de visitante –en un encuentro oficial- fue ante el Alavés, el 23 de abril de este año, cuando lo superó 2-0 por la 34ª fecha del último campeonato español.

"Hace una semana no lo teníamos claro, pero Messi tuvo una gran evolución", soltó el DT blaugrana este lunes, en la previa del duelo ante los alemanes, rivales del Grupo F junto al Inter y el Slavia de Praga. "Tengo ganas de verlo jugar, como siempre. Ojalá pronto esté con nosotros", lo invitó el arquero culé, Marc-André ter Stegen. Y hasta el capitán del Borussia, Marco Reus, abraza su vuelta: "Me alegro de que venga. Está claro que con Messi son más fuertes, estamos hablando del mejor jugador del mundo. Queremos que juegue". Con su regreso sueñan también los hinchas del Barcelona, que ahora tienen a Messi, ese que es capaz de entrar unos minutos en el Signal Iduna Park, hacer alguna maravilla y devolverle al fútbol eso que le faltaba.