La provincia de Buenos Aires que gobierna María Eugenia Vidal registra los peores indicadores laborales del país. El desempleo en el conurbano bonaerense escaló al 12,7 por ciento durante el segundo trimestre del año, un incremento de 0,3 puntos frente al mismo período del año pasado. El deterioro es incluso más significativo en Mar del Plata. La desocupación en la ciudad balnearia asciende hasta el 13,4 por ciento al computar un incremento de 5,4 puntos porcentuales en doce meses. A nivel nacional la tasa de desempleo para el período que va entre abril y junio ascendió hasta 10,6 por ciento, el registro más elevado de los últimos catorce años.
Uno de cada tres aglomerados urbanos relevados por la Encuesta Permanente de Hogares del Indec marcó niveles de desempleo superiores al 10 por ciento. La crisis laboral penetra sobre la estructura productiva y social de todas las provincias. En la región de Gran Córdoba el desempleo escaló 2,1 puntos para llegar al 13,1 por ciento. Salta, por su parte, registró un marcado deterioro de 2,7 puntos, que elevó el nivel de desocupación hasta 12,7 por ciento.
El deterioro laboral industrial se observa en la escalada del desempleo en Santa Fe donde la desocupación alcanzó al 10,3 por ciento en San Nicolás-Villa Constitución, con fuerte incidencia de empresas automotrices y metalúrgicas. En el Gran Rosario, por su parte, el desempleo llegó a 10,6 por ciento. En el noroeste, el agrlomerado Gran Tucumán-Tafí Viejo marcó un 10,7 por ciento.