Para Benjamín Gebhard, de la consultora WE, y Martín Sánchez, de Doxa, la elección provincial está dividida en tres tercios “en donde el primero no le llega a sacar 15 puntos al tercero” y no se podrá especular hasta último momento con ningún resultado.
“Sigue (el actual intendente Gustavo) Sáenz en primer lugar, segundo se ubica el Frente de Todos y tercero el espacio del diputado nacional Alfredo Olmedo”, manifestó Gebhard.
Para ambos consultores, será importante saber cómo se configura el electorado del Frente de Todos, que es el que tiene internas entre Miguel Isa y Sergio Leavy. Coincidieron en que sería Leavy el ganador pero no está claro a dónde irán los votos de Isa en las generales de noviembre.
También será interesante ver qué hará el electorado de Olmedo, si es que su candidato culmina tercero en las PASO.
“Sáenz tiene mucha fuerza en Capital, arriba del 40 por ciento, pero hay que ver qué puede hacer en el interior, territorio de Leavy, que tiene la mejor estructura”, dijo Sánchez.
Quien sin dudas tiene una posibilidad de pegar un último salto es Sergio Leavy. Para los analistas, esto dependerá, del gesto que tenga Cristina Fernández cuando venga a Salta el fin de semana y de la visita que realice o no Alberto Fernández luego de las generales nacionales y antes de las provinciales.
Los dos opinaron que ese sería para Leavy un espaldarazo que lo ubicaría más cerca de la gobernación. “Sin dudas, la clave de la elección provincial, pasa por ver cuánto de lo nacional, se traslada a lo provincial”, subrayó Sánchez.
En cuanto a la intendencia de Salta, coincidieron en que la elección será muy competitiva, aunque el espacio de Sáenz pica en punta. Las internas entre Bettina Romero, Martín Grande y Matías Posadas serán muy peleadas, aunque lleva una leve ventaja la hija del ex gobernador.
Las generales dependerán mucho de quién sea el que se quede con la interna en el frente de Sáenz “porque si es Grande el que gana en las primarias, seguramente se polarizará mucho con el espacio del Frente de Todos, ya que se nacionaliza la elección. Eso no pasaría si ganan Romero o Posadas”, agregó Sánchez.
Dentro del Frente de Todos, quien está encabezando las encuestas es David Leiva.
En cuanto a lo nacional, Gebhard aseguró que los números son similares al escenario que se vivió en las PASO en Salta, “el Frente de Todos probablemente puede que supere los 50 puntos en octubre, pero no creo que mucho más que eso”.
En consonancia, Sanchez opinó que es probable que la brecha se agrande, “porque no se alteró nada con respecto a la previa de las PASO, al contrario, se agudizaron casi todos los conflictos. Hay un Macri cada vez con menos potencialidad electoral y un Fernández que uno hasta ya lo piensa como presidente”.
Para los consultores, lo más interesante está entre el segundo y el tercero, porque allí se define quién se queda afuera y quien logra un senador.
“Son dos puntos de diferencia”, resaltó Sánchez, y prosiguió “en los números, yo te diría que es muy difícil que se revierta, sobre todo porque Lara Gros no es un candidato con tanta fuerza. Pero creo que esto es lo único interesante que nos pueden presentar las elecciones generales en Salta”, dijo el representante de Doxa.
A su vez, Gebhard indicó que a Consenso Federal se le hace más difícil, “porque en la provincia no se pintan del mismo color” sino que sus candidatos se diluyen en los otros espacios, “entonces es muy difícil que después de las elecciones provinciales del 6 de octubre, se vuelvan a pintar de Consenso Federal para acompañar a los candidatos a diputados y senadores”, manifestó.
En ese sentido, quien lleva ventaja es el actual senador y pre candidato a continuar en la misma banca, Juan Carlos Romero, “que tiene otro peso y otra imagen más conocida, comparada con Lara Gros”.
“Lo mismo sucede con el radical Miguel Nanni, que es pre candidato a vicegobernador y está recorriendo la provincia con las dos candidaturas (la de diputado nacional) y le da una gimnasia que los de Consenso Federal no tienen”, añadió Benjamín Gebhard.
Los problemas de los salteños
Sánchez y Gerbhard sostuvieron que para los salteños el principal problema está ligado a la situación económica, centrada en la inflación y el trabajo. “Eso configura un estado de ánimo negativo”, indicó Benjamín Gebhard.
“La gente tiene bronca en un 33 por ciento y está frustrada en un 26. Y hay un 44 por ciento que dice que no llega a fin de mes”, aseguró el analista de WE, para quien el dato más relevante es que el 60 por ciento de los consultados tiene preocupación por perder su trabajo en los próximos 12 meses