De la página al escenario. En agosto pasado, un grupo de periodistas inquietos lanzó a la web el sitio emepea.com, dedicado a retratar el buen pasar de la música popular argentina. Pero como la música es un material sensible, vivo y requiere de energías presentes, subieron la apuesta y se animaron a materializar lo que contaban con palabras. Así nació la primera edición del Festival Emepeá, que arrancará hoy a las 21 y seguirá el 3 y 10 de marzo, en el ND/Teatro (Paraguay 918). “La idea era buscar otra instancia de comunicación con el público. Y por el tipo de artistas que elegimos se trata de dejar asentada una idea de música argentina con una personalidad precisa. Una manera, también, de escuchar música y de contextualizar artistas que vienen de otras latitudes”, explica Santiago Giordano, editor del sitio. Esta noche, precisamente, se presentarán la uruguaya Ana Prada, Amores Tangos y Aura!; el viernes 3 subirán al escenario Bruno Arias, La Bruja Salguero, Lito Vitale Trío y Los Amigos del Chango; y el 10 será el turno de Daniel Maza Grupo, Lorena Astudillo y Dos Más Uno. “La idea es que sea un punto de encuentro, como pensamos que debe ser la revista digital. Y ojala el festival se afiance, porque podría ser una fecha importante para la música argentina”, se entusiasma Giordano de cara al futuro –o al presente mismo–.

El presente, justamente, de la música argentina es auspicioso. “Creo que es el mejor momento de la música argentina en la historia”, sentencia el periodista. “Hay calidad, variedad y se han consolidado distintas tendencias. Es una etapa postindustrial: ya no está la industria del disco condicionando las decisiones estéticas. Eso ha dejado crecer a muchas expresiones válidas que alimentan esta gran realidad que es la música argentina de hoy –describe–. Y eso se suma al notable nivel técnico de los músicos, algo impensado hace algunos años, que también les permite dialogar con otras músicas”. Durante el festival convivirán expresiones diversas como la impronta del cancionista –Ana Prada o Bruno Arias, por caso– y ensambles como la Orquesta Popular de Cámara Los Amigos del Chango o el trío Aura!, integrado por Popi Spatocco (piano), Ricardo Cánepa (contrabajo) y Facundo Guevara (percusión).

Prada será uno de los conciertos centrales de esta noche. La uruguaya estuvo recorriendo el país el año pasado junto a Pata Kramer, pero esta vez se presentará como solista. “Hay que apoyar este tipo de iniciativas que muestran una gran diversidad musical y reúnen a músicos impresionantes”, resalta Prada. “Argentina y Uruguay se han influído mutuamente. Es un intercambio que se dio naturalmente desde (Carlos) Gardel o (Alfredo) Gobbi. Hoy hay un recambio generacional interesante, hay mucho cantautor y cantautora nueva. Y esto está haciendo posible, sobre todo en Uruguay, vivir de la música y tomarla como una profesión y un modo de vida”, enmarca ella. “En la conversación entre los países se aprende y se crece. Y esto que hace Emepeá posibilita un intercambio muy necesario”, dice la uruguaya. 

En la segunda fecha (3 de marzo), la riojana La Bruja Salguero presentará un nuevo repertorio de canciones que integran el espectáculo Norte, que pronto canalizará en un disco. “Hacía falta un espacio para mostrar las propuestas musicales del país, porque a veces los medios nacionales no están tan atentos a las realidades de las provincias”, celebra Salguero, quien en la última edición de Cosquín recibió el premio Consagración. 

Esta noche también sonará una propuesta más bailable. Amores Tangos, el grupo que aborda el tango desde una mirada plural y latinoamericana, hará un recorrido por sus dos discos y adelantará canciones de un nuevo material. “No son artistas con los que nos solemos cruzar en el escenario, por eso es un desafío mayor. De todas formas, Amores Tangos siempre está laburando para la integración. Se ve en nuestro repertorio y en nuestro público. Y estas propuestas nos encantan porque suman a eso que queremos lograr: que vengan personas de distintas edades a escuchar músicas variadas”, apunta el pianista Juan Tarsia.