Las ventas en supermercados volvieron a caer en términos reales en todo el país y en Salta lo hicieron en forma más pronunciada. Los datos del INDEC muestran que los supermercados salteños vendieron en julio pasado un 36 por ciento más que en el mismo período de 2018. Sin embargo, se trata de un incremento en términos nominales. Si uno le aplica la inflación, que en ese lapso fue del 56 por ciento para el Noroeste Argentino, la caída real de las ventas alcanza un 20 por ciento en términos reales.
En el caso de los comercios salteños, la mayor caída se dio en indumentaria, calzado y textil, que retrocedió casi un 40 por ciento real, seguido por bebidas, que lo hizo en un 35 por ciento. También cayeron considerablemente panadería y electrónicos (alrededor del 26 por ciento, una vez que se le aplica la inflación del período). Los rubros que reflejaron menores caídas fueron almacén y carnes.
Según el gerente de la cadena de supermercados “Miguelito”, Leonardo Mercado, los datos del INDEC coinciden con la caída de las ventas que ellos estiman, y reflejan también cambios en el comportamiento de los consumidores a partir de la crisis.
“La gente está priorizando comer”, aseguró el jefe de la cadena de comercios que tiene sucursales en localidades del interior provincial. “En Güemes hemos notado el cierre de fábricas, muchas empresas del Parque Industrial que lamentablemente cerraron, hoy las casas de electrodomésticos y los locales de ropa están cerrando y la gente realmente está priorizando comer”, detalló.
Mercado relató que frente a la caída general de las ventas de productos, notaron un incremento en las galletitas crackers y mermeladas, y lo atribuyó a que “hoy la gente en vez de cenar de noche prefiere merendar y subsistir con ese alimento nada más”.
El gerente de la cadena de supermercados que tiene sucursales en General Güemes, Campo Santo y Joaquín V. González, consideró que “es notoria la tendencia de caída de las primeras marcas” y que “la gente se vuelca mucho por las segundas marcas, por las ofertas, optan por productos más económicos, lo que no significa menor calidad, sino que no es tan reconocido en el mercado”.
Además, Mercado relató que la cadena que conduce realiza todos los miércoles una feria de panadería en la que comercializa el kilo de mignon a 59 pesos. “Es impresionante la cantidad de pan que compra la gente. No sé si lo frizará, o lo guardará o cómo hará para mantenerlo, pero hay clientes que se llevan 4 o 5 kilos de pan”, se sorprendió.
Finalmente, al ser consultado sobre la eliminación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que implementó el gobierno nacional sobre algunos alimentos, el gerente de “Miguelito” aseguró que “lo que hizo la quita del IVA fue sostener el precio que tenían los productos antes de la devaluación posterior a las elecciones”. “Pero algunos precios ya volvieron a subir y ya se comieron la eliminación del IVA”, se lamentó.