Los Pumas se quedaron sin margen de error para clasificarse en su grupo. Perdieron con Francia en el debut del Mundial y ahora deben ganarle a Tonga. Es el primero de los tres partidos que les quedan. Después vendrán Inglaterra y Estados Unidos. Mario Ledesma confirmó cuatro cambios, dos entre los forwards y otros tantos entre los backs. Las salidas del apertura Nicolás Sánchez y el hooker Agustín Creevy dan una señal de que nadie tiene asegurado un lugar como titular. Son el goleador histórico y el capitán durante el ciclo anterior con Daniel Hourcade. Pero hacen falta más que variantes en los nombres para cumplir la meta de mínima: pasar a los cuartos de final del torneo.
La Selección nacional debería parecerse a la del segundo tiempo con los franceses. La remontada del 20 a 3 no alcanzó pese al cambio de cara. Argentina jugó mal la primera parte y ahí redujo mucho sus chances. Tonga es un rival de tercer o cuarto nivel internacional. En su último amistoso antes de la Copa del Mundo perdió 92 a 7 con los All Blacks. Cayeron de nuevo con los ingleses en la primera fecha de la Copa, pero por menos (35 a 3). Y con los Pumas hay un solo antecedente: es del Mundial 2015. Fue victoria cómoda por 45 a 16 con apenas cinco jugadores que se repiten como titulares: Petti, Lavanini, Matera, De la Fuente y Moroni.
Ahora los cuatro cambios que decidió Ledesma son: Montoya por Creevy, Lezana por Ortega Desio, Urdapilleta por Sánchez y el juvenil Carreras por Moyano. Los tres primeros reemplazados van al banco. El wing tucumano ni eso. Si el partido con Tonga saliera previsible, si los Pumas impusieran condiciones y no se dejaran arrastrar al desorden táctico de los isleños, tendrían que imponerse con cierto margen y hasta punto bonus. Pero los problemas del seleccionado son conocidos: sus baches, la por momentos llamativa falta de tackle, la ineficacia para definir situaciones de try, aun cuando las generen. Con Francia se perdió por ese combo, la floja conducción de la pareja de medios (Sánchez-Cubelli), los puntos a los palos que se desperdiciaron y hasta un regular arbitraje.
Una buena noticia para los Pumas será la presencia de Bautista Delguy entre los suplentes después de diez meses. El wing pintaba para ser titular hasta que se lesionó de gravedad un tobillo. Tiene una habilidad que desconcierta y la profundidad para atacar que el equipo necesita. A la selección le bastará también con repetir su muy buen nivel en las formaciones fijas: sobre todo en el line. El scrum también evolucionó, que era su punto más flojo en esta temporada.
Tonga no es un rival que haya progresado en su juego. Integra el lote de selecciones como Fiji y Samoa, con un ADN rugbístico que combina fortaleza física con destreza, pero con una débil defensa y anarquía táctica. El mejor antecedente de los tonganos en Copas del Mundo fue en 2011, cuando dieron el batacazo y le ganaron a Francia 19 a 14. El equipo del reino polinesio con jugadores de nombres impronunciables (Halanukonuka, Halaifonua, Tameifuna, Vaipulu y Kalamafoni, entre otros) es la primera vara que deberá superar Argentina. La más alta, Inglaterra, deberá saltarla una semana después. En ese partido se jugará el porcentaje más grande de sus chances de clasificación. Los puntos bonus y hasta la suma de tries podrían ser determinantes para decidirlo.
La formación de Los Pumas que saldrá a la cancha en el estadio Hanazono de Osaka a la 1.45 (hora argentina), un rato después del mediodía en Japón, va con Tetaz Chaparro, Montoya y Figallo; Petti y Lavanini; Matera (capitán), Lezana y Kremer; Urdapilleta y Cubelli; Carreras, De la Fuente, Orlando y Moroni; Boffelli.