Los presidentes de River Plate, Rodolfo D'Onofrio, y Boca Juniors, Daniel Angelici, compartieron este lunes una reunión en Luque, Paraguay, con el titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez, en la previa del primer Superclásico de la serie semifinal de la Copa Libertadores. En el encuentro también estuvieron los presidentes de Flamengo y Gremio de Porto Alegre (este último, a través de una videollamada), ya que son los equipos brasileños que se enfrentarán en la otra llave del certamen.
Durante la reunión se confirmó el horario de la final única, que será el 23 de noviembre en Santiago de Chile, a las 17.30 (hora local). La justificación del horario radica en generar un mayor alcance en los cinco continentes, donde habría una potencial audiencia de 1.500 millones de espectadores a través de la retransmisión del partido a más de 100 países.
En ese marco, y según lo aprobado por el Consejo de Conmebol, se ratificó que el nuevo campeón continental recibirá un premio de 12 millones de dólares, y el subcampeón otro de 6 millones de la misma moneda. Además, los dos clubes finalistas van a percibir un 25 por ciento de la recaudación neta de la venta de entradas para dicha final.