"Vuelo de mariposas” no es sólo el nombre que dos conjuntos musicales decidieron ponerle al show que hacen juntos esta noche, sino también un posicionamiento político hecho palabras. Las mariposas representan, en el diccionario de Memoria, Verdad y Justicia, a los 30 mil detenidos desaparecidos durante la última dictadura cívico militar, por la simple (¿simple?) razón de que siempre que una movilización popular los invoca allí están ellas, sobrevolando la zona, dando cuenta de lo presentes que están. “Simbolizan las vidas de los que ya no están porque se comprometieron con las de los demás”, asegura a Página/12 Lili Isaguirre, del Grupo La Tranquera (GLT), banda convocante, junto a Wauque, al concierto que esta noche en el Caff (Sanchez de Bustamante 722) homenajeará a militantes de distintos organismos de derechos humanos.
Las metáforas sobre mariposas y vuelos recorren toda la charla que este diario mantiene con Isaguirre, su compañero Kochy Guchea (cofundador, con ella, de la banda de “ChacaRock”), y Alejandro Chamorro, uno de los hermanos que dan vida a Wauque, enfocada en los sonidos de los pueblos latinoamericanos. Los tres se reconocen comprometidos con la realidad que los rodea y militantes activos por la vuelta de un gobierno “nacional y popular”. “Uno planifica las fechas con meses de anticipación y sabíamos que para este momento íbamos a estar en campaña. Lo que no teníamos tan claro era que iban a soplar tan fuertes los vientos de renovación y que íbamos a poder contribuir con este concierto a que esas mariposas puedan volver a volar después de cuatro años en los que fueron empujadas a ser orugas”, dice de entrada, por ejemplo, Guchea.
La fecha de esta noche será la segunda de una serie de conciertos en los que los músicos se plantean homenajear a referentes “que pelean desde hace años por un horizonte de utopías”. Esta vez será el turno de Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), Lita Boitano (Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas), Graciela Lois (Defensoría del Pueblo), Adelina de León (prima de Edith Vilma de León, docente desaparecida) y Felipe Vallese (hijo), a quienes las bandas les dedicarán composiciones de autorías varias, y con quienes prometen terminar bailando un carnavalito “para celebrar la vida no desde el dolor sino desde el arte”.
“La idea es contar aquello que la historia decidió ocultar y poner en valor a todas las personas y pueblos que no tuvieron justicia en el pasado y que no la tienen en la época actual”, apunta Chamorro, que deja ver que pese al énfasis puesto sobre las víctimas del terrorismo de Estado el concierto va por más: “En los últimos años hubo una política que hizo desaparecer a muchos más de los nuestros de forma silenciosa. Hubo cientos de chicos discapacitados que se quedaron sin sus pensiones o ancianos a los que les negaron su medicación”, completa Isaguirre, convencida de que “juntarse ante esa realidad ya es de por sí un signo de esperanza”.
Planteado como propuesta común y con el acento en las raíces de la música latinoamericana, ambos colectivos recorrerán canciones propias y ajenas con el apoyo de distintas producciones audiovisuales que rendirán tributo a los detenidos desaparecidos. GLT hará temas de Víctor Heredia y Raúl Carnota, entre otros músicos, y también tocará la canción que le hizo a Estela de Carlotto e Ignacio Montoya Carlotto, su nieto, con motivo de su reencuentro. Wauque, por su parte, presentará su último disco, Originarios, y hará un repaso por las melodías de las culturas originarias y andinas, a las que también considera oprimidas por el aparato represivo estatal.
“Vamos a revalorizar la cultura nuestra y además poner de relieve lo que pasa en las calles”, adelanta Chamorro sobre el show. “A tocar para todos lo compañeros militantes que perdieron la vida y para aquellos que siguen luchando en cada rincón del país”, agrega Guchea. “A sumar un granito de arena para que a partir del 10 de diciembre las mariposas no tengan que esconderse y puedan volver a animarse a volar”, cierra Isaguirre sobre una noche que promete música, baile y mucha emoción.