El asesino de cuatro policías el jueves pasado en París estaba en contacto con movimientos extremistas y había planeado su ataque. Lo determinó la investigación del fiscal antiterrorista francés, Jean François Ricard, quien también informó que el asesino se había convertido al islamismo hace una década.
El fiscal aseguró que el hombre, al que denominó Mickael H., trabajaba en la Dirección de Inteligencia de la Prefectura de Policía. El jueves, en la jefatura policial de París asesinó a cuatro policías e hirió gravemente a otro. La investigación arrojó que esa misma mañana compró en una tienda cercana dos cuchillos, uno de ellos de 33 centímetros. Logró introducirlos en la Prefectura, tras lo cual perpetró sus ataques en tan sólo siete minutos. Además, durante ese día intercambió hasta 33 mensajes de carácter exclusivamente religioso con su mujer, que se encuentra detenida.
El fiscal Ricard reveló que en el pasado el hombre había dado su aprobación a "ciertas exigencias cometidas en nombre del islam". Decidió cortar cualquier contacto con las mujeres, había cambiado su forma de vestir y justificó ante un compañero el atentado contra la revista satírica Charlie Hebdo del 7 de enero de 2015. También informó que mantenía contactos con individuos pertenecientes al movimiento extremista salafista, un grupo de ultraderecha islámico suní de carácter reformista y ultraconservador.