Los demócratas eligieron al latino Tom Pérez, ex secretario de Trabajo de Barack Obama, como nuevo presidente de su Comité Nacional. La decisión, votada durante el encuentro realizado en Atlanta, es el primer paso en la vida del partido tras la derrota de Hillary Clinton ante Donald Trump en las elecciones de noviembre del año pasado, e indica la continuidad de la línea moderada del establishment partidario.
La victoria de Pérez implicó la derrota de Keith Ellison, diputado por Minnesota, afroamericano, musulmán y avalado por el ala izquierda del partido, con Bernie Sanders a la cabeza.
Pérez, es hijo de dominicanos, tiene 55 años, y fue secretario de Trabajo de la última administración demócrata. Se opone a la política inmigratoria de Trump, pero advirtió que no cierra la puerta a trabajar en asuntos donde haya coincidencias, como el aumento del salario mínimo.
Ellison es afroamericano, tiene 53 años y en 2006 se convirtió en el primer legislador musulmán del país; al asumir su banca, juró por el Corán. Ellison es partidario de una oposición más activa a Trump y planteó abiertamente la posibilidad de impulsar el juicio político al magnate.
Tanto Pérez como Ellison coinciden en que el partido debe recuperarse a nivel territorial, sobre todo en cuanto al voto rural y de la clase media blanca, un sector clave en la derrota de noviembre. Ahora, Pérez deberá rearmar el partido de cara a las elecciones de medio término de 2018, cuando se renovará toda la cámara de representantes y un tercio del Senado, cuerpos en los que actualmente la mayoría es republicana.
El cargo que determinaron 447 asambleístas está vacante desde mediados del año pasado, cuando renunció Debbie Wasserman Schultz. Una serie de e-mails internos difundidos a través de WikiLeaks revelaron el intento del Comité Nacional Demócrata de obstaculizar la campaña de Sanders, y eso llevó a la caída de la cúpula del partido.