A dos semanas de las elecciones generales, el oficialismo recrudeció sus críticas contra la Corte Suprema de Justicia y Comodoro Py. Lejos de la independencia que el oficialismo dijo defender, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano se mostró molesto por los últimos fallos adversos del máximo tribunal contra su gestión. “Quiero creer que es una Corte independiente, tan independiente que parece opositora”, se quejó el funcionario nacional. 

Garavano expresó su malestar puntualmente por el fallo que declaró la “inconstitucionalidad” de la resolución del Ministerio que él encabeza, por la cual se intentó reducir una cuarta parte de las indemnizaciones establecidas por el Congreso para quienes fueron víctimas de exilio forzoso durante la última dictadura. De acuerdo al ministro, no se trata de un fallo adverso al gobierno sino “al estado y todos los argentinos”. 

En este punto, el funcionario apeló a hablar del supuesto costo que implica la decisión judicial. “Los que vamos a tener que pagar esa diferencia no es el gobierno, son los argentinos, no nos confundamos”, señaló. Al explicar el alcance de la medida, volvió a invocar los mismos argumentos con los que quizo justificar la resolución en su momento, ayer desestimados por el máximo tribunal. 

Así, Garavano se refirió a las supuestas diferencias respecto de la afectación de derechos entre exiliados y efectivamente detenidos. “El fallo equipara la situación de los exiliados con los detenidos durante la dictadura que, sabiendo que son situaciones muy dramáticas las dos, son totalmente diferentes”, insistió en diálogo con radio La Red.

Los jueces Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Ricardo Lorenzetti y Horacio Rosatti cuestionaron ayer la disposición que modificaba “un aspecto sustancial del régimen de la ley” 24.043, en tanto “altera los parámetros previstos en la ley para determinar el monto”, en contra del principio de división de poderes. Carlos Rosenkrantz no firmó la sentencia. 

“Hoy tenemos un sistema de Justicia que goza de todas las independencias, podamos compartir o no los fallos”, evaluó un día después Garavano, quien volvió a insistir en que “lo que ellos interpretan lo vamos a pagar todos nosotros con los impuestos”. “Son fallos contra todos los argentinos, si pensamos que es contra el gobierno de turno estamos equivocados”, reforzó.

Desde su asunción, el presidente Mauricio Macri y sus ministros se ufanaron de respetar la división de poderes, pero en la práctica cuestionaron la mayoría de las sentencias que fueron en contra de lo dispuesto por el Ejecutivo o de la doctrina Bullrich en Seguridad. Hace dos semanas, Macri presentó un proyecto de reforma del Código Procesal Civil y Comercial destinado a agilizar y modernizar los procesos, momento que utilizó también para cargar contra “la Justicia”.