El presidente de la Unión Industrial Argentina, Miguel Acevedo, habló sobre el pacto social al que se refiere Alberto Fernández, candidato a presidente del Frente de Todos. Dijo que es “un acuerdo que hay que hacer patrióticamente para que Argentina pueda salir adelante”. Así lo aseguró durante la apertura de la preconferencia industrial, llevada a cabo en la sede porteña de la UIA, donde se presentó la agenda productiva para los próximos cuatro años, con propuestas para exportar y generar valor al mundo.
Lo primero que hizo Acevedo al arrancar el encuentro fue agradecer la presencia de los sindicalistas, Rodolfo Daer (Alimentación) y Antonio Caló (UOM), sentados en las primeras filas del auditorio. Y luego se refirió al pacto social: “Estamos empezando a caminar un acuerdo que vamos a tener que hacer en Argentina los trabajadores, los empresarios y toda la producción”. El titular de la UIA también le agradeció la presencia a los representantes de empresas como General Motors, y al economista especialista en temas industriales Bernardo Kosacoff.
Acevedo dijo que la presentación del plan productivo es “el aporte de los industriales al país”. Pero dijo que será la política la que deberá llevarlo adelante “para poder tomar las decisiones que necesita Argentina”. El Plan Productivo 20/23 está centrado en políticas relacionadas a costos, productividad, tecnología, competitividad y desarrollo industrial. La plataforma ya fue presentada a los candidatos a presidente Alberto Fernández y Roberto Lavagna, pero no a Mauricio Macri, aunque asegurán que la invitación "sigue vigente".
Tras el discurso de apertura, afuera del auditorio donde se llevaba a cabo la presentación, llegó el momento de la foto: Miguel Acevedo junto a Antonio Caló y Rodolfo Daer. “Fue una muy grata sorpresa estar acompañado por estos líderes sindicales. Podemos hablar, discutir, estos no serán acuerdos espurios”, aseguró Acevedo. Uno de los temas en los que coincidieron que van a avanzar es en la modificación de los convenios colectivos de trabajo. “Para competir con el mundo hay que ser tan productivo como el resto. La tecnología es una invasión y nos tenemos que adecuar”, agregó el empresario.
Con esta mirada también coincidieron Caló y Daer. “La reforma de los convenios tiene que hacerse, el de la UOM es de 1975, quedó obsoleto”, justificó Caló. “La tecnología expulsa trabajo, pero también lo genera. Alguien tiene que fabricar la tecnología, repararla, manejarla, hay nuevos trabajos, no tengamos miedo a adecuar el convenio”, explicó el sindicalista. Dijo que desde hace dos años trabajan en la modificación del convenio, sin que esto haya sido un pedido de la UIA. Una vez que lo terminen, se lo presentarán a los empresarios metalúrgicos para discutirlo por actividad. “Los sectores conservadores (que se resisten) a esto van a quedar expulsados del mercado laboral”, adelantó.
También Daer dijo que adecuarán el convenio en el gremio de la alimentación. Sin embargo, explicó que habrá que discutirlo “cuando exista desarrollo” y no en la actualidad, “con un sistema financiero inviable y donde en el mejor de los casos se trabaja al 40 por ciento de la capacidad industrial”. En este sentido, Acevedo concluyó: “Somos personas civilizadas, que no queremos ir contra los derechos de los trabajadores, sino ver cómo creamos más y mejores empleos”.
El llamado pacto social será tripartito, es decir, lo llevarán a cabo los trabajadores, los empresarios y también el próximo Gobierno. De Juntos por el Cambio no estuvo presente ningún referente. Del lado del Frente de Todos, asistió Juan Ignacio “Vasco” de Mendiguren, diputado nacional, quien conoce de cerca los pedidos de los industriales por haber sido titular de la UIA, pero además conoce de cerca el plan económico de Alberto Fernández, por su cercanía a Sergio Massa. Entre los pedidos industriales y las políticas del plan económico de Fernández, De Mendiguren dijo que hay dos coincidencias: la primera, que el sector a priorizar será el productivo; y la segunda, que una de las formas de reactivar la economía será a través del incentivo a la demanda, con “plata en el bolsillo de los trabajadores y el control de la inflación para mantener el poder adquisitivo". Tras la reunión del miércoles pasado con los industriales, Fernández había dicho que estaba de acuerdo con el planteo de la baja de impuestos, pero que iba a ser difícil llevarlo a cabo por el aumento del déficit fiscal, debido al impacto que tuvieron los intereses de la deuda. “Creciendo vamos a arreglar la macroeconomía, y no al revés como cree el Gobierno”, agregó De Mendiguren.
En la entrada de la sede porteña de la UIA, y frente a la placa de inauguración, donde figura el nombre de Fernando de la Rúa como presidente, y De Mendiguren como titular de la entidad, el diputado dijo a este diario que esta situación le trae un recuerdo del 2001. “Cada sector es una perla de un collar que necesita ser enhebrado. El acuerdo deberá ser con todos los sectores adentro, no sólo con los trabajadores, las empresas y el Gobierno, sino también con universidades, organizaciones sociales y hasta la Iglesia”, aseguró.