La habilitación de los barrios construidos con el ProCreAr también hubiera impedido el cierre de muchos negocios y pequeños emprendimientos productivos. En la línea de Desarrollo Urbanístico del ProCreAr está contemplado un espacio para locales, lo que le hubiese aliviado la situación a los que no pueden enfrentar el costo pleno de un alquiler comercial. En total hay 950 locales en estos desarrollos que podrían alquilarse o entregarse en leasing con facilidades, además de estimular la actividad en esos barrios y empujar la rueda del consumo.
Uno de los casos más emblemáticos es la Estación Buenos, en CABA, donde hay 73 locales comerciales vacíos. En este barrio además hay 2406 viviendas sin entregar sobre un total de 2476. Le sigue en importancia Estación Sáenz, con la totalidad de las 711 viviendas sin entregar, al igual que los 14 locales. Son los proyectos urbanísticos más importantes en extensión e inversión que se hicieron en esos barrios dentro del programa ProCreAr. El complejo viviendas en Ushuaia tiene sus 481 casas vacías, como así también sus cinco locales comerciales. En este caso además afecta el desmantelamiento del polo tecnológico en La Isla, lo que provocó una migración de trabajadores desempleados –con sus familias- hacia el Continente.
Hay muchos casos más donde se podrían haber utilizado estos desarrollos para estimular la actividad, aunque sea desde lo comunal. En Buenos Aires, en Canning hay 17 locales vacíos; en San Antonio de Areco, 92 locales; en San Nicolás, 22, en Ituzaingó, 30 y en Tandil, 82. En Córdoba hay dos complejos, uno en Alejandro Roca, con 34 locales vacíos, y otro en Barrio El Liceo, con 218. En la ciudad de Corrientes, 25 locales más sin utilizar, en Granadero Baigorria (Santa Fe), lo mismo con 14.
En Río Gallegos no se habilitaron 32 locales del desarrollo, en Madryn sucede lo mismo con 47 locales, en Mendoza, con 39, y en Santa Rosa (La Pampa), 43. En Huaico (Salta) se suman 34 locales en las mismas condiciones, en San Luis, 28 y en Santiago del Estero, 20 más.