En el Mundial de fútbol de Rusia, Japón fue una de las revelaciones por su toque, su audacia y su juego asociado. Le dio un fenomenal paseo a Colombia en la fase de grupos, y en los octavos de final cayó 3-2 ante la poderosa Bélgica, en un partido que se definió en el último minuto. Los japoneses tenían un córner a favor, fueron a buscar con mucha gente y en la contra los belgas se quedaron con la victoria. Emocionaron con su vocación ofensiva, aunque debieron pagar un alto precio por su ingenuidad.
En el Mundial de rugby de Inglaterra, los japoneses debutaron ante Sudáfrica y jugaron un partido extraordinario. Perdían 32-29 y sobre la hora tuvieron un penal a favor. Si lo convertían empataban, pero se la jugaron, pidieron scrum y fueron a buscar el try. Ganaron 34-32 en la victoria más resonante de su historia.
En el actual Mundial de rugby, los dueños de casa pasaron a los cuartos de final encadenando victorias ante Rusia, Irlanda, Samoa y Escocia. Son, como la Selección de fútbol en Rusia, una de las revelaciones del campeonato por el uso brillante de las manos, su audacia y su juego asociado.
En el reciente partido ante Escocia, en el que se impusieron 28-21 concretaron un try extraordinario (para muchos el mejor del torneo), con una sucesión de pases admirable. El rugby que le gusta a la gente, diría un futbolero romántico. Ahora, en los cuartos de final tendrán que vérselas con Sudáfrica, siempre candidato al título. Y tienen reales chances de atravesar ese escollo por su nivel de juego, y por el impulso que da el antecedente del triunfo en Inglaterra.
Japón jugó todos los mundiales de rugby y tiene en su legajo el triste record de haber padecido la derrota más abultada de todo el historial: 145-7 contra Nueva Zelanda en 1995. Desde entonces su crecimiento ha sido, como puede apreciarse, extraordinario y el deporte se ha popularizando al compás de sus resultados y de la influencia de entrenadores y jugadores neocelandeses. En el fútbol jugaron su primer Mundial en el '98 (debutaron contra Argentina y perdieron 1-0 ) y desde entonces no faltaron a ninguna cita. Lo notable en el caso del fútbol es el fenomenal peso del manga (las historietas, en especial una llamada ” Supercampeones”) en el desarrollo de la actividad entre los jóvenes. Cuatro veces fueron campeones de Asia en los últimos años. Y en los mundiales que siguieron al de Francia mostraron altibajos, pero ya nadie los subestima, ya nadie les gana con la camiseta.
Japón juega un fútbol y un rugby que crece y emociona . Y además empieza a encontrar muy buenos resultados con lo suyo. Enhorabuena.