Alberto Fernández ratificó ayer en Rosario lo que será la estructura en la que se apoye su eventual gobierno: los 24 gobernadores, apoyados a su vez en sus intendentes y presidentes comunales. "Hasta ahora fracasamos en federalismo. Hagamos un país federal y entre todos definamos las urgencias del país. Nos vamos a levantar entre todos, y que esta haya sido la última caída", dijo el candidato presidencial del Frente de Todos. Esta coalición produjo ayer en el salón Metropolitano otra demostración de cohesión política y consenso territorial al reunir a cientos de intendentes y presidentes comunales de varias provincias, pero también a sindicalistas y dirigentes de organizaciones de base de Rosario y la región. Todo coronado por la visita de Fernández, que hizo agenda continuada desde el debate del domingo en Santa Fe y que aquí elevó al primer plano a María Eugenia Bielsa, en tanto eventual futura ministra de Vivienda.
El gentío festejó al escuchar el grito de un militante: "¡Sacaste a pasear al Gato, Alberto!", cuando Fernández se sentaba en el escenario con Bielsa, y los electos Omar Perotti y Alejandra Rodenas, y el flamante gobernador electo de Chaco, Jorge Capitanich. Así cerraba el Foro de Ciudades sobre Hábitat, Federalismo e Identidad. Cuadros técnicos habían disertado ante los jefes municipales y sus equipos, a modo de aprontes de las políticas públicas que generará el eventual gobierno de Fernandez desde diciembre. Por eso es que Bielsa estuvo desde temprano yendo y viniendo, coordinando el desarrollo del encuentro junto a la intendenta de La Matanza y candidata a vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, y oficiando como anfitriona, en tanto ministra designada de la futura cartera de Vivienda.
"Seremos mejor país cuando un jujeño pueda nacer, crecer, prosperar y morir en Jujuy", dijo y levantó aplausos.
La presentación de Fernández y Perotti estuvo prologada por la transmisión en directo desde El Calafate de la presentación que Cristina Fernández de Kirchner hizo de su libro Sinceramente. Y cuando la ex presidenta apareció en escena y en la pantalla gigante, resurgió el coro en Santa Cruz y en Rosario: "Ohhhh,vamos a volver… a volver a volver, vamos a volver".
Mientras tanto, al mediodía, Fernández y Perotti, instalados desde la mañana en el hotel de Mitre y Catamarca, recibían al intendente electo, Pablo Javkin. Y hubo foto oficial del encuentro (ver aparte).
Prueba de ese consenso perseguido fueron los rostros que a la tarde se dieron cita en las primeras filas del salón del Scalabrini Ortiz. Estuvieron referentes gremiales a uno y otro lado de la CGT, CTA y del Movimiento Sindical Rosario, hasta algún jefe comunal no peronista y dirigentes sociales y políticos extra PJ como el ex concejal Nire Roldán y Juan Carlos Rodríguez (Miles FTV). El peronismo también dio el presente completo, incluido el sector de senadores, con Armando Traferri y Danilo Capitani en el entorno del armado del gobierno de Perotti.
"Alberto, querido, la Lepra está contigo", gritaron desde el fondo. Y Fernández chanceó acerca de si la mejor cantera del fútbol es Newell's o su querido Argentino Juniors. "Soy porteño, pero he salido muy federal", dijo y enfocó la esencia de su mensaje.
El ganador de las Paso marcó las desigualdades entre Buenos Aires y el resto del territorio, y convocó a "resolver entre todos cuáles son las urgencias de Argentina". Reiteró aquello de un presidente que gobierne junto a 24 gobernadores, y valoró que en ese grupo estén desde diciembre Capitanich y Perotti. "Fue un gran intendente, será un gran gobernador", auguró.
Con un auditorio dominado por municipios y comunas, Fernández prometió profundizar el federalismo. "Seremos mejor país cuando un jujeño pueda nacer, crecer, prosperar y morir en Jujuy", dijo y levantó aplausos.
Perotti instó a "ser la red que necesita Alberto y la fuerza que el 27 garantizará el triunfo, el sueño que nos despertó Alberto y Cristina".
Puso como ejemplos que las exportaciones de Patagonia, Cuyo y NOA salgan por el Pacífico y "no todo por el puerto de Buenos Aires".
Concedió razón a su competidor Roberto Lavagna al aludir en el debate sobre el escándalo del hambre y su impacto en la niñez. "Hay una ley de emergencia alimentaria y el Ejecutivo sigue sin hacer nada", dijo.
De Bielsa dijo que lo está "ayudando mucho" en política de vivienda, que será un eje de su gobierno. La ex precandidata que compitió con Perotti celebró eso de "un presidente con 24 gobernadores", pero también advirtió que "un gobernador debe gobernar con sus intendentes y comunas".
Antes, Perotti se invistió de albertismo explícito y exhortó a los referentes convocados a "formar la red que necesita Alberto, y ser la fuerza que el 27 garantizará el triunfo". También valoró el rol de los intendentes como figura de Estado más próxima al ciudadano y les confirió la "responsabilidad ante este sueño que nos despertó Alberto y Cristina".
Abogó por mayor federalismo y descentralización territorial, y llamó a "quitarnos esta vergüenza del hambre en Argentina".