El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a vetar una medida del Congreso contra el desvío de fondos destinados a la construcción del muro en la frontera con México. La medida había sido decretada por el mandatario en febrero, amparado en la emergencia nacional. Ahora, la invalidación del veto resultaría casi imposible para ambas Cámaras del Congreso, ya que deberían alcanzar una mayoría de dos tercios. Como resultado de la política antimigratoria de Trump, casi un millón de migrantes que intentaron ingresar al país por la frontera sur fueron detenidos o declarados inadmisibles en el último año.
En un mensaje enviado al Congreso, Trump anunció su decisión de frenar una resolución conjunta del Senado y la Cámara Baja aprobada en septiembre, porque "afectaría a la capacidad del país de mantener seguras sus fronteras". En marzo de este año, Trump emitió el primer veto presidencial desde su asunción en enero de 2017 por el mismo motivo. Respondía a una resolución similar de ambas cámaras del Congreso.
"La situación en nuestra frontera sur sigue siendo una emergencia nacional, y todavía necesitamos a nuestras Fuerzas Armadas para ayudarnos a afrontarla", expresó el mandatario. Trump justificó su declaración de emergencia por una supuesta "invasión" de drogas y criminales en la frontera con México.
La declaración permite a los presidentes estadounidenses acceder temporalmente a una potestad especial para hacer frente a una situación de crisis. Trump se valió de la ley de emergencia para destinar a la construcción del muro los fondos que el Congreso había aprobado para otras partidas.
La declaración de emergencia del mandatario se produjo después de que republicanos y demócratas no alcanzaran un acuerdo presupuestario en el Congreso frente a las exigencias del presidente Donald Trump respecto al muro fronterizo. Aunque los dos partidos habían pactado el presupuesto vigente el 20 de diciembre de 2018, el presidente se negó a aprobarlo por no incluir los más de 5 mil millones de dólares destinados a la construcción del muro.
La situación derivó en un cierre parcial de la Administración entre diciembre de 2018 y enero de 2019. El bache terminó cuando el presidente finalmente aceptó 1.370 millones de dólares destinados a la protección fronteriza.
Conseguir la invalidación del veto de Trump no será tarea fácil para el Congreso. Requerirá una mayoría de dos tercios en ambas cámaras, un escenario improbable dado que solo 54 de los 100 miembros del Senado votaron a favor de la resolución conjunta contra el desvío de fondos, y 236 de los 435 integrantes de la Cámara de Representantes hicieron lo propio.
Un millón de migrantes detenidos
Como consecuencia de la campaña antimigratoria dirigida por Donald Trump, casi un millón de migrantes fueron arrestados o considerados inadmisibles para ingresar a Estados Unidos desde la frontera con México en los últimos 12 meses. Los datos surgen de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. La última vez que la cifra rondó el millón de detenciones fue en 2006. Si se desprende por meses, el número de emigrantes detenidos tuvo su pico en mayo, al alcanzar la cifra de 144 mil.
Durante los últimos meses, el gobierno estadounidense intensificó las medidas para desalentar el éxodo de los migrantes desde países como Honduras, Guatemala y El Salvador, y presionó a México para que accediera a firmar un acuerdo que impide el tránsito de indocumentados. El acuerdo también exige que los emigrantes soliciten asilo en el primer país al que ingresan.
Los solicitantes de asilo, que antes eran liberados en territorio estadounidense hasta la resolución de su caso, y muchas veces no comparecían ante los jueces, deben ahora aguardar la resolución de solicitudes en México. La medida recibió duros cuestionamientos por parte de la Justicia.