El Frente Nacional Campesino (FNC) volvió a llamar la atención sobre la escasez de agua que soportan y la falta de ayuda estatal para quienes viven y producen en el Chaco salteño, en los departamentos San Martín y Rivadavia. Un comunicado de la entidad reconoció que hubo chaparrones y lloviznas en algunos parajes pero insistió en que “la sequía persiste y está provocando mucha pérdida a los pequeños ganaderos”, al punto tal que ya se encuentran en una situación de emergencia agropecuaria, afirmó.
La organización sostuvo que las familias campesinas “carecen de agua limpia para el consumo familiar, y la mayoría de las cañadas y madrejones se han secado o se están secando. No quedan pastizales y los montes están muy empobrecidos por la falta de lluvia y el cambio climático. Se calcula que un 80% de los pequeños ganaderos están sufriendo grandes pérdidas en la producción".
En los puestos campesinos, de diferentes parajes, se pueden observar los animales menores y mayores muy desnutridos y en muchos casos mueren de hambre. Los animales de bajo peso no son de interés para los compradores de hacienda o los adquieren a precios muy bajos, lo cual "profundiza la insolvencia y los problemas sociales, ya que es la principal fuente de ingreso de las familias campesinas".
El FNC aseguró que ante la emergencia necesitan "la presencia de las instituciones del estado municipal, provincial y nacional para que asistan con agua y forraje en los parajes campesinos".
"A la grave crisis económica y social que padecen las familias campesinas se suma la falta de agua, el alto costo del combustible para bombear agua, y la pérdida de ganados destinados al sustento familiar y a la venta", reseñaron en un comunicado en el que también denunciaron que los pobladores sufren el cuatrerismo, "una constante" que actualmente "ha empeorado" porque "las bandas delictivas se aprovechan de la delicada situación que atraviesan los pequeños productores por la sequia, para robar los animales que andan desesperados buscando agua y forraje".
Las familias campesinas solicitaron que el Estado las ayude llevando agua y forraje hasta los puestos y parajes afectados por la sequía; que se hagan obras para provisión de agua, como perforaciones para extraerla de las napas subterráneas, y represas y depósitos para la cosecha de agua en tiempos de lluvia. Y que se tomen medidas para la "prevención y represión del cuatrerismo".
Provisión en camión cisterna
La falta de agua también está provocando inconvenientes en los poblados del Chaco salteño, donde escasea para consumo humano. La provisión se está realizando mediante un camión cisterna, de propiedad de Nelson Robledo, uno de los herederos que vive en la finca El Palmar, en Los Blancos, en el departamento Rivadavia.
Robledo tiene un camión cisterna desde 2007. “Lo vi como un instrumento de trabajo”, dijo. Sucede que había obras que se hacían sobre la ruta nacional 81 que iban a necesitar el riego. Con este camión hace cinco años abastece a distintos parajes de la zona de Los Blancos adonde no llega el agua o llega agua “salada”, que es a su vez facturada por la empresa Aguas del Norte, aseguró Robledo.
El agua es tomada desde una gran represa que se generó por los trabajos que se hicieron en la ruta y donde el agua se acumuló. Para poder acceder a ese agua muchos recorren entre dos y cuatro kilómetros con dos bidones.
“A mí me dejaron sacar dos veces agua con el camión cisterna para repartir, pero no me dejaron sacar más”, contó. Según los administradores de la finca donde se encuentra la represa, esa parte también sería “alquilada” por la petrolera High Luck Group Limited - Pampa Energía SA, que explota el subsuelo de la finca de los Robledo.
