Un hombre fue detenido en Berisso acusado de haber participado del secuestro de Carla Ferrer, la joven de 18 años que permaneció cautiva durante 17 días en una casa de esa localidad bonaerense donde la derogaron y violaron, según informaron fuentes policiales y judiciales.

Se trata de José Luis Radawich (49), quien fue imputado como “coautor de la privación ilegítima de la libertad” de la muchacha, por cuyo ataque permanece prófugo el principal sospechoso, Pablo Reinoso (38), quien residía en la vivienda donde ocurrieron los hechos.

Según las fuentes, Radawich fue detenido ayer como resultado de allanamientos realizados en Berisso y la localidad platense de Cite Be ll en busca de Reinoso y en los que además fue secuestrado un Forado Escoto blanco en el que se cree que la víctima fue trasladada desde Plaza Moreno, en pleno centro de la capital bonaerense, hasta la casa donde luego permaneció cautiva.

Una fuente judicial explicó que Radawich se negó a declarar ante el fiscal de la causa, Al varo Garganta, quien dispuso que en los próximos días se realice una rueda de reconocimiento del detenido para determinar con precisión el rol que tuvo en el hecho.

El mismo vocero indicó que la principal hipótesis es que el acusado ayudó a Reinoso en la privación ilegítima de la libertad de Ferrer pero no habría participado de los abusos que sufrió la joven durante su cautiverio, lo que espera poder establecer con la rueda de reconocimiento.

En ese sentido, la pista apunta a que Radawich no participó tampoco de la captura inicial de la víctima, sino que concurrió luego a la vivienda de Reinoso cuando la joven ya estaba secuestrada allí, dijo la fuente.

Luego de la indagatoria, Radawich seguirá detenido a disposición del fiscal Garganta y del juez de Garantías platense, Juan Pablo Masi.

El hecho investigado comenzó en la madrugada del domingo 5 de febrero último, cuando Ferrer salió de bailar con una amiga del boliche Milenium y se dirigió con ella y su hermana a la Plaza Moreno de La Plata.

En la plaza las tres conocieron a dos hombres, uno de ellos Reinoso, quien las invitó a subirse a su auto para ir a tomar algo a su casa, situada en calle 162, entre 14 y 15 de Berisso, junto con un amigo, aunque su hermana finalmente no acudió.

“Fuimos ahí. Mi amiga se fue con el otro hombre y yo me quedé con Pablo, que me ofrecía droga, me pedía que tome cocaína. Después le dije que no quería más, que quería ir a mi casa. Me amenazó, me pegó, abusó de mí y me obligo a tener relaciones con otras personas. Todos esos días me obligo a tomar cocaína”, manifestó Ferrer.

Según el relato de la propia víctima, el calvario se extendió varios días ya que su captor la drogaba constantemente bajo amenazas con un arma, la golpeaba y la obligaba a mantenerse tendida en una cama, donde le tiraba baldazos de agua y luego hacía pasar a hombres para que abusaran sexualmente de ella.

Sobre el momento en que fue rescatada de la vivienda del captor, la joven recordó que pudo acceder a una tableta Ipad que habían dejado cargando en la casa y que ella usó para entrar a una cuenta de Facebook que estaba abierta, desde la cual le escribió a su madre para pedirle que la fuera a buscar.

Cecilia Ferrer, madre de la víctima, contó que la tarde del martes pasado recibió por el chat de Facebook un mensaje de una persona desconocida que le pedía ayuda y le decía que estaba cautiva. 

“Yo sabia que era mi hija por su forma de escribir”, aseguró la mujer, quien de inmediato fue a la seccional décima de La Plata y pidió que la ayudaran a rescatar a la joven.

“Eran ya las once de la noche cuando fuimos a la casa. El agente le preguntó si conocía a Clara Ferrer y dijo que no, lo negó. Pero el policía empieza a gritar desde la puerta `Clara ¿estás acá?` y en eso se escucha que ella grita `acá estoy má` y baja corriendo por la escalera semidesnuda. A todo esto, el tipo empuja al oficial, lo hace caer y se va corriendo”, recordó la mujer.

Tras la liberación de Ferrer, los investigadores comenzaron a buscar a Reinoso, sobre quien pesa una orden de captura nacional e internacional aunque las sospechas apuntan a que el prófugo está cercado y que no salió del país.