Los damnificados por los créditos UVA para vivienda cuestionaron el anuncio que realizó el presidente Mauricio Macri en el debate del pasado domingo, adelantando que las cuotas se actualizarán desde el 1º de enero por evolución de salarios y no por inflación. "No deja lugar para el análisis, es la nada misma. Si es una medida que realmente tiene la convicción de aplicarla por qué no se aplica ya, nosotros en este momento tenemos la urgencia de que haya una medida concreta que resuelva nuestro problema", dijo ayer Evelina Fernández, integrante del grupo UVA Santa Fe. En la provincia hay cerca de 16 mil familias damnificadas, y aquellas que tienen las cuotas al día hoy deben el doble de capital. "Estamos atrapados en un sistema que es realmente perverso, sin ninguna solución real, la verdad es que no tenemos expectativas de este gobierno. Creemos que con el próximo hay una nueva visión de lo que significa la vivienda familiar. Si la arquitecta María Eugenia Bielsa va a estar en Vivienda, tenemos idea de que tiene otra sensibilidad con respecto al tema", planteó Fernández.
Entre las pocas medidas que el gobierno nacional tomó para mitigar la dramática situación que padecen miles de personas que sacaron un crédito ajustado por inflación fue el congelamiento de las cuotas desde agosto hasta diciembre. Para la referente del grupo UVA Santa Fe se trató de una medida parcial e insuficiente porque no involucra a todos los hipotecados. "Tiene parámetros por los cuales muchos quedamos afuera. Y aquellos que tuvieron congelamiento de las cuotas, la verdad que fue irrisorio, no sabemos si fue para tomarnos el pelo o una medida de marketing, lo que fue aplicado fueron como mucho entre 300 y mil pesos en una cuota de entre 20 y 30 mil pesos, la diferencia no es sustancial", señaló Fernández.
Los hipotecados remarcan que no pretenden un subsidio del Estado por haber tomado un préstamo para tener una vivienda, y consideran que el problema es más profundo como así también la solución. "El contexto inflacionario no es una variable que nosotros podamos manejar", apuntó Fernández, quien sacó un crédito de 1,8 millones de pesos para construcción en enero de 2018. Finalizaron la obra en diciembre de ese año, y habiendo pagado en término todas las cuotas, a la fecha deben el doble de capital.
"En la mayoría de los contratos, al tercer mes de adeudar las cuotas, la ejecución es directa, ni siquiera hay que pasar por un trámite administrativo ni judicial. No tenemos más margen, al 1º de enero la inflación va a ser del 18 por ciento y nuestros sueldos no son acordes, habrá muchas familias que van a encontrar su vivienda ejecutada", advirtió en diálogo con Rosario/12 la referente del grupo UVA Santa Fe.
Reveló que "llamativamente" la semana pasada muchas familias recibieron correos electrónicos de los bancos anunciándoles que bonificaban los costos de cancelación total del préstamo: "Creemos que los bancos también están abriendo el paraguas para maximizar la rentabilidad y maximizar nuestra pobreza. Pero tratar de cobrar el capital abismal del que se han apropiado, para nosotros ilegítimamente, porque es una usura. La verdad es que están fuera de foco porque no contamos con ese capital para cancelarlo, para eso pedimos un préstamo".
"Tanto del gobierno como de los bancos hemos escuchado las cosas más disparatadas y alejadas de la realidad que existen. Nosotros, desde el colectivo, hemos conseguido instalar nuestro problema y sensibilizar al vecino común porque no queremos que nos regalen nada, queremos pagar pero en condiciones justas y que los bancos no hagan el gran negocio con la clase media trabajadora", concluyó.