"Si dios quiere, el domingo vamos a empezar a dar vuelta esta página negra que comenzó a escribirse en 2015", aseguró el candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, quien compartió un acto con la aspirante a convertirse en la intendenta de La Plata, Florencia Saintour. El encuentro se realizó en el salón de actos de la facultad de Psicología de la Universidad de La Plata. Allí, Fernández convocó a trabajar duro esta semana para "llenar de votos las urnas" y así demostrarle al gobierno macrista que comenzará una nueva etapa para el país que tendrá como eje el retorno de los derechos abandonados por el presidente Mauricio Macri.
El candidato que comparte la fórmula con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió que "tenemos que pensar en el día 28 porque nos van a dejar un país muy complicado, en el que cuatro millones de argentinos quedaron debajo de la línea de pobreza y que con Macri y sus políticas otra vez hay argentinos que volvieron a tener hambre".
En ese sentido, Fernández señaló que "Macri no entiende que las peores sociedades son las que quitan derechos. Ocurre que la Argentina tiene el índice de desocupación más alto de los últimos 13 años. Por lo tanto, cuando Macri se vaya el 40 por ciento de los argentirnos estarán por debajo de la línea de pobreza", indicó. Es más, advirtió que todo esto ocurrió porque el Presidente "piensa que trabajar es un costo y el que trabaja no debe tener derechos y por eso eliminó el Ministerio (de Trabajo)".
Ese argumento le sirvió al candidato del Frente de Todos para afirmar que el gobierno "tuvo el tupé de decir que los desocupados se reconvertirán y se volverán emprendedores y perdieron los derechos". Para Fernández esta política provocó lo que denominó como "la uberización de la economía" que consistió en "quitarle responsabilidades a los empresarios y sacarle derechos a los trabajadores. Eso es inadmisible porque solo sirve para enriquercer aún más a los ricos y postrar más a los que ya están mal", dijo y anunció que "lo que haremos es una Argentina con más derechos donde se respete el aporte de todos y cada uno de los argentinos y argentinas".
Fernández pidió no confiarse para este domingo, llamó a "llenar las urnas de votos" y convocó a los presentes a ser generosos "como lo fue Cristina y todos salgamos a convencer al resto de los argentinos y salgamos a convocar a los que no están convencidos". En ese sentido dijo que es preciso "dar la vuelta la Argentina" y que en estos tiempos del gobierno macrista significa "ordenar el país". Es por eso que reiteró su decisión de "hacer que la luz y el gas deje de ser un negocio para los amigos del presidente y sea un negocio para los que producen. Vamos a hacer que dejen de cerrarse 43 pymes y vuelvan a abrir sus persianas, saquen las lonas de sus maquinarias y las llenen de trabajadores".
En esa línea, señaló que en su gobierno "vamos a hacer que los trabajadores vuelvan a recuperar sus ingresos al igual que los jubilados. Les vamos a dar medicamentos toda su vida porque no pueden pagar para poder sobrevivir", dijo
"Es inadmisible que el gobierno no entienda que un chico que no se alimenta es un chico que se está quedando sin futuro", alertó, y dijo que "todo esto pasa porque cada vez que agarran el gobierno apagan la economía y hacen negocios ellos y sus amigos".
En otro tramo de su discurso, Fernández elogió al movimiento feminista al que consideró un actor preponderante en la discusión pública de los últimos años para visibilizar no sólo el problema de la violencia contra la mujer sino otras injusticias vinculadas a la desigualdad de género. "Vamos a ocuparnos a partir del 10 de diciembre para que todas las mujeres tengan todos los derechos que necesitan para ser iguales a los hombres. Y que todas las personas tengan los mismos derechos más allá de la identidad de su genero", aseguró.