El lunes por la mañana comenzará el juicio oral y público al pediatra Ricardo Russo, ex jefe de una unidad del Hospital Garrahan y acusado de “producción, facilitación, distribución y tenencia con fines de distribución” de material derivado de explotación sexual infantil.
El proceso, informó en un comunicado la justicia porteña, contará con las declaraciones de más de 50 testigos, y terminará en los primeros días de noviembre. El pediatra Russo, que fue detenido a fines de mayo en el estacionamiento del Garrahan como consecuencia de una investigación iniciada en Estados Unidos y Brasil, llegará al debate oral en prisión preventiva, que le fue dictada al día siguiente de su detención y que, desde principios de septiembre, cumple de manera domiciliaria .
Las audiencias serán públicas, pero por afectar los derechos de menores de edad “no se permitirá bajo ningún concepto la presencia en la Sala de Audiencias de medios de comunicación ni de público durante la producción de la prueba”, advirtió la justicia porteña.
El debate estará a cargo del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 6 de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de Gonzalo Rúa, que convocó la primera audiencia oral y pública para el lunes a las 10 de la mañana. El tribunal convocó a declarar a 53 testigos, 36 de ellos ofrecidos por la querella y la fiscalía y 17 por la defensa del pediatra.
En un comunicado, la justicia porteña detalló que está previsto que el debate continúe martes 29, miércoles 30 de octubre y lunes 4 de noviembre. Sin embargo, añadió, “es posible, de acuerdo al desarrollo de las audiencias, que tenga que prolongarse en una o dos jornadas más, en cuyo caso ello tendría lugar los días martes 5 y miércoles 6 de noviembre”.
En el juicio, el ministerio público fiscal estará representado por Daniela Dupuy, titular de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº 12, quien también fue responsable de la instrucción de la causa. La querella está a cargo del Consejo de Administración del Garrahan (que apartó de su cargo al pediatra en junio de este año) y la Asesoría Tutelar, que tendrán representaciones letradas diferentes (María Susana Ciruzzi, Gustavo Enrique Montenegro y Carlos Gabriel Jait por el Garrahan; Rodrigo Dellutri por la Asesoría Tutelar en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 2.
Por su parte, la defensa del pediatra Russo, ex jefe del Servicio de Inmunología y Reumatología del Garrahan, estará a cargo de Ricardo Mario Izquierdo.
La investigación internacional que terminó con la detención del pediatra
El caso comenzó con la operación denominada Luz de Infancia II, iniciada por investigaciones del área de la norteamericana Homeland Security dedicada a delitos contra niñas y niños y del Ministerio de Justicia de Brasil. Datos de tráfico de datos detectados en internet llevaron a las autoridades norteamericanas y brasileñas a informar al cuerpo de investigaciones judiciales del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires sobre distribución, a través de la plataforma P2P "E-mule", de materiales producidos a partir de explotación sexual infantil.
El ex jefe del Servicio de Inmunología y Reumatología del Garrahan está acusado de "tenencia, distribución y producción de pornografía infantil", por materiales que involucraban a niños de entre seis meses y 14 años de edad.
En noviembre de 2018, la justicia porteña allanó la casa de Russo, en Núñez, y secuestró computadoras en las que los peritajes hallaron 761 imágenes y 2 videos de explotación sexual infantil.
En otro peritaje se encontraron fotos que databan del mediodía del 24 de noviembre de 2015. Eran 9 en total, y habían sido tomadas en el Garrahan con un iPhone 6. En los registros, las víctimas son dos niñas, de entre 6 y 9 años. Luego, los peritos encontraron 39 fotos de enero del mismo año tomadas en la playa con una cámara digital, y en las que las fotos también eran de niñas.
Este año, al día siguiente de la primera audiencia de prisión preventiva, tras un allanamiento en el consultorio que Russo tenía en el Garrahan, se encontraron más imágenes y videos de las mismas características que las halladas en los dispositivos secuestrados en su casa.