El resultado electoral en la Patagonia resultó fulminante para la Alianza Cambiemos. El Frente de Todos sacó más de 30 puntos de diferencia en Tierra del Fuego y Santa Cruz, otros 28 puntos de ventaja en Río Negro y más de 20 en Chubut. En el caso de La Pampa, la diferencia fue de 12 puntos y en Neuquén, de 10. En estos últimos cuatro años, la región fue convertida en el patio trasero de la Argentina y la ciudadanía se lo hizo saber al Gobierno saliente en las urnas.
Los guarismos obtenidos por el Frente de Todos dieron cuenta, en parte, de las consecuencias de las políticas económicas de la Alianza Cambiemos. En diciembre de 2017, en las provincias de Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego había 192.194 personas bajo la línea de pobreza. Un año después, el Indec registró 258.111 personas en estas condiciones. Es decir, 65.917 personas más. Durante el primer semestre de 2019, la pobreza alcanzó a 295.427 personas, es decir un incremento total del 54 por ciento.
Con un 95 por ciento de mesas escrutadas en Tierra del Fuego, la fórmula Alberto Fernández - Cristina Fernández de Kirchner obtuvo el 56,9 % de los votos frente al 26 % de Macri – Pichetto. Esta provincia fue una de las más golpeadas durante estos últimos 4 años, con más de 7800 puestos de trabajo destruidos (la mayoría de la industria manufacturera) y un incremento de su deuda, a partir de la emisión de títulos en dólares, del 592 por ciento.
En Santa Cruz, jurisdicción que sufrió los recortes de recursos de Nación desde diciembre de 2015, principalmente con el freno de obras emblemáticas como la finalización de una usina térmica en Río Turbio o las represas hidroeléctricas, el Frente de Todos obtuvo el 59,4 por ciento de los sufragios frente al 28,6 por ciento de Juntos por el Cambio.
La diferencia en Río Negro fue de 28,7 puntos a favor de la fórmula Fernández - Fernández. En esta jurisdicción se destruyeron 7200 puestos de trabajo entre diciembre de 2015 y el mismo período de 2018 y el stock total de su deuda creció un 331 por ciento y el acumulado de intereses se multiplicó por 46 veces según cifras del Ministerio de Hacienda.
El ajuste macrista sobre la región conjugó quita de recursos con deuda en moneda norteamericana, algo que terminó transformándose en un verdadero salvavidas de plomo por la devaluación del peso.
En Chubut, el Frente de Todos obtuvo el 52,1 por ciento de los sufragios frente al 29,6. Esta es otra de las provincias donde puede palparse el modelo de ajuste del Gobierno saliente. La deuda total de la provincia aumentó un 450 %, se destruyeron más de 6400 puestos de trabajo con eje con el sector petrolero, en donde se acordó una modificación de los convenios colectivos de trabajo. Algo que también se conoce como flexibilización laboral.
La conjugación de estas variables –deuda, despidos y ajuste fiscal de Nación- provocó un incremento exponencial de la pobreza concentrada en Comodoro Rivadavia, Rawson y Trelew. Estas tres ciudades explican el 57 por ciento del incremento de la pobreza de toda la Patagonia según los últimos datos del Indec.
Y en Neuquén, una provincia gobernada por Omar Gutiérrez (MPN), mandatario que se mostró cercano a Macri durante los últimos años, la fórmula Fernández – Fernández obtuvo el 47,6 por ciento de los votos frente al 37,5 de Macri – Pichetto. En esta jurisdicción se aplicó el primer experimento flexibilizador con la modificación de los convenios colectivos de trabajo en Vaca Muerta con un trágico resultado: 8 muertos en menos de 15 meses. No por nada, Guillermo Pereyra, titular del Sindicato de Petroleros Privados, quedó tercero (y por ende afuera) en la contienda por un lugar en el Senado.