No importa que sea el último en las posiciones de la Liga española y que este miércoles tenga una parada bravísima, cuando visite al Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu. Los jugadores del Leganés no perdieron su buen humor y disfrutaron de una práctica muy divertida antes de jugar ante uno de los gigantes del fútbol español.
Todo sucedió en la entrada en calor de la última práctica antes visitar al Real Madrid. En ese momento, los jugadores dirigidos por el entrenador Luis Cembranos participaron de un particular juego, que a su vez tenía otros fines como mejorar los reflejos, buscar velocidad y cambios de ritmos y fomentar la improvisación.
El juego consistía en que cada futbolista debía capturar cuatro pecheras ubicadas sobre cuatro conos que formaban un cuadrado en el círculo central de la cancha. La dificultad radicaba en que tenían que hacerlo mientras el resto de sus compañeros les apuntaba con una pelota gigante, que si los tocaba automáticamente los dejaba fuera de competencia. Para evitar los pelotazos, los futbolistas debían recurrir a cualquier artilugio: correr, frenarse, saltar o volar, de acuerdo a como les llegara el balón gigante.
Las situaciones graciosas, con algunas caídas espectaculares, relajaron al grupo antes del trascendental partido, en el que buscarán su segunda victoria del certamen, después de haber ganado el sábado el primer encuentro 1-0 ante el Mallorca, para cortar una racha negativa que constaba de dos empates y siete derrotas desde que se inició el certamen.