El presidente Mauricio Macri decidió enfrentar a la CGT por la movilización convocada para el 7 de marzo. “Todas las cosas que estamos viendo lo que muestran es que hay una ansiedad por disparar el año electoral”, apuntó el líder de PRO después de preguntarse “¿cuál es la lógica de la movilización?” de la central obrera. Juan Carlos Schmid, uno de los tres secretarios generales de la CGT, le respondió en diálogo con PáginaI12: “No es culpa nuestra que este sea un año electoral. Defendemos la misma agenda de los trabajadores desde hace ya tiempo”, dijo, descartando las chicanas presidenciales.
“Nuestros reclamos centrales son la desocupación y pérdida de puestos de trabajo y la reducción del poder adquisitivo”, aseguró Schmid, reiterando los temas que están en la cima de la agenda sindical. El titular de la poderosa Confederación Argentina de los Trabajadores del Transporte (CATT) salió a responder las palabras que Macri había dicho en un reportaje grabado mientras completaba la gira diplomática por España. “Está claro que partimos de diagnósticos diferentes y que sea un año electoral o no para los trabajadores es irrelevante”, apuntó el gremialista, confrontando con los dichos del Presidente a una semana de la marcha convocada por la CGT y a la que ya se sumaron las dos CTA que conducen el docente Hugo Yasky y el estatal Pablo Micheli.
Las declaraciones de Macri a la prensa pueden ser un anticipo del discurso que dará mañana ante la Asamblea Legislativa, donde hará un repaso de su primer año de gestión y planteará algunos lineamientos políticos y económicos para este año. “El camino es dialogar, sentarse en una mesa y no ponerse a hacer política porque comienza el año electoral”, sentenció el Presidente, acusando a la CGT de aprovecharse de la coyuntura electoral y sin asumir el escenario político y social generado por las decisiones de su gobierno, que dejaron un tendal de despidos, los fuertes aumentos tarifarios en los servicios, la devaluación y la inflación sostenida. Según la mirada del jefe político de Cambiemos, somos “un país que hace cuatro meses que todos los días está un poco mejor y en el que hay varios sectores que se están reactivando”.
Macri insistió en que “todas las cosas que estamos viendo, lo que muestran es que hay una ansiedad por disparar el año electoral que va en contra de lo que necesitan los argentinos que es armonía, tranquilidad, resolver los temas. Ese es el camino del progreso”, dijo, intentando disuadir a fuerza de choque verbal la iniciativa de la central de trabajadores. También mostró datos sobre el empleo y aseguró que “se generaron entre julio y diciembre más de sesenta mil puestos de trabajo y desde enero parece que veinte mil”, intentando mostrar un repunte en la economía que ratificó al resaltar que “el país está arrancando”.
“Atanor, Volkswagen, Banghó, La Serenísima, son todas empresas que cerraron plantas o suspendieron trabajadores y solo son unas pocas de las muchas que están en esa situación. Mastellone está cerca de ir por el mismo camino. Es evidente que tenemos diagnósticos muy distintos con el Gobierno”, afirmó Schmid, poniendo sobre la mesa los empleos formales perdidos en los últimos meses que contrastan con los datos del Presidente.
“Estamos organizando una movilización muy fuerte en la que van a participar todos los gremios confederados”, destacó el dirigente cegetista a la vez que anunció que se dará a conocer un documento titulado “Sin mercado interno no hay desarrollo posible”. “Hay una confrontación con las políticas económicas del Gobierno. Puede ser fuerte la palabra –destacó Schmid–, pero es la realidad.”