El presidente de Bolivia, Evo Morales, culpó a la oposición por los hechos de violencia que se vienen registrando en el país. El miércoles, como resultado de enfrentamientos entre opositores y sindicalistas afines al gobierno, hubo dos muertos en la ciudad Montero, cercana a Santa Cruz de la Sierra. El candidato opositor Carlos Mesa pidió una investigación independiente de los hechos. A través de un comunicado de su partido, Comunidad Ciudadana, volvió a rechazar la auditoría de la votación que la Organización de Estados Americanos (OEA) ya comenzó a realizar. Se espera que los resultados estén en doce días.
Luego de conocer la información sobre las muertes en Montero, Evo Morales envió sus condolencias a las familias. "Lamento mucho lo que está pasando en Bolivia", dijo durante un acto en la ciudad de El Alto. "Ganamos y empiezan las agresiones", señaló en referencia a la oposición y movimientos cívicos que no reconocer su victoria en las elecciones del 20 de octubre y se movilizan en varias zonas del país. Morales aseguró que ya antes de los comicios estos movimientos ciudadanos habían anunciado que no reconocerían su triunfo. "Digan lo que digan, el pueblo ha ganado las elecciones", sentenció el mandatario. Y expresó que el intento de "golpe de Estado" de la oposición fracasó gracias al apoyo de sus militantes. Hizo un agradecimiento a los mineros, campesinos y otros trabajadores que marcharon estos días para apoyarlo.
En la tarde del miércoles se produjo la muerte de dos personas en Montero, ubicado a 50 kilómetros de Santa Cruz de la Sierra. Según informó el Ministerio de Gobierno boliviano, también hubo seis personas heridas. Además informaron que se están desarrollando las investigaciones y que cuentan con elementos para identificar a los autores de los hechos. Según pudo conocerse, el enfrentamiento involucró a grupos separatistas de Santa Cruz con sectores campesinos sindicalizados afines al gobierno. Mario Salvatierra, de 55 años, y Marcelo Terrazas, de 41, fallecieron en los disturbios. Ambos recibieron disparos y murieron cuando eran atendidos en clínicas de Montero, según medios locales. En esa región del país, grupos contrarios a la reelección de Morales, mantienen una huelga ciudadana con bloqueos de calles y rutas. También en Potosí y Cochabamba se registraron estas medidas de fuerza.
Por su parte, Carlos Mesa vinculó a los militantes del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Evo Morales, con los asesinatos. “Que Morales dé orden a los militantes del MAS, que están en estas acciones inaceptables de violencia desmedida, a que se replieguen y que cesen esos actos". Además, pidió una investigación imparcial e independiente sobre los hechos para llegar a los responsables. "No creemos en absoluto en el Ministerio Público masista", advirtió. El político instó a sus seguidores a mantener de forma pacífica las movilizaciones para denunciar el supuesto fraude electoral de Morales.
Sin embargo, el partido de Mesa, Comunidad Ciudadana, emitió un nuevo comunicado en el que reiteraron que no aceptarán la auditoría de la OEA, que ya comenzó a realizarse. “El Ejecutivo no ha permitido la necesaria participación de representantes de la sociedad civil en el proceso", sostuvieron. Objetan que el gobierno no los invitó a participar en las negociaciones con la OEA.
Mientras, una nueva comisión de este organismo ya se instaló en el país, comenzando la auditoría. A través de ella buscan determinar si existió fraude electoral a favor del MAS, como denuncia la oposición. Una parte del equipo de la OEA llegó el jueves y el resto está previsto que lo haga en los próximos días, explicó el canciller de Bolivia, Diego Pary. “Estamos cumpliendo los cronogramas", explicó.
Por parte de la OEA, Arturo Espinosa, coordinador técnico del equipo llegado a Bolivia, indicó que serán unas treinta personas las que realizan el “trabajo técnico de integridad electoral”. El organismo se centrará en la verificación: de cómputos, incluidas actas, papeletas y votos; del proceso, en aspectos informáticos y estadístico; y de la cadena de custodia de las urnas. "Estos puntos fueron expresados en conversación telefónica con el ex presidente Carlos Mesa, quien había expresado su acuerdo respecto a los mismos", subrayó. "En el día de hoy, los especialistas se reunirán con el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para solicitar toda la documentación y accesos que van a necesitar para su labor", señaló Espinosa. “Cuando todos los especialistas estén desplegados, se hará un llamado a partidos políticos, academia y sociedad civil para que entreguen la información y denuncias que consideren deben ser analizadas por los auditores", agregaron. Estiman poder terminar el trabajo en doce días. Luego entregarán un informe al secretario general del organismo, Luis Almagro, y lo harán público. El gobierno y la OEA acordaron que los resultados serán vinculantes.