Con 280 espacios culturales (públicos y privados) abiertos (y sin cobrar entrada) de 20 a 3 de la madrugada, se realizó la décimo sexta edición de La Noche de los Museos organizada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. La estrella de este año fue el artista plástico Julio Le Parc, maestro de la luz y el movimiento. Como parte del homenaje por sus 90 años (cumplidos en 2018) se hizo una proyección de más de treinta de sus obras, acompañadas por obras de Bach, Gershwin, Beethoven, Chet Baker, Astor Piazzolla. Tres instituciones más exhibieron obras del artista mendocino, pionero del arte óptico y cinético. En el Centro Cultural Kirchner (Sarmiento 151) se ofreció la muestra Julio Le Parc. Un visionario, con proyecciones de documentales y visitas guiadas. En el Museo de Bellas Artes (Libertador 1473) se expuso un centenar de pinturas, dibujos, acuarelas y grabados de su obra más temprana. Finalmente, la Torre Galicia (Perón 430) permitió apreciar la obra Sphère Acier Miroir, una esfera de acero espejado compuesta por 2.692 piezas de metal, distribuidas en 4,5 metros de diámetro, con charlas introductorias a la obra de Le Parc del curador de arte Mariano Guilmore.
La otra vedette de esta edición fue la Confitería del Molino, una maravilla del Art Nouveau en Buenos Aires y que los porteños quieren entrañablemente. Tras décadas de abandono, los trabajos de restauración ya permiten ver los primeros resultados y en esta Noche de los Museos hubo largas filas para poder ver cómo paulatinamente recuperando su esplendor.