Tupac Puggioni es hijo de desaparecidos, a su padre lo asesinó la Triple A en 1974. Su madre fue secuestrada y desaparecida en 1976 por los militares con un embarazo en curso, aún está buscando a su hermano.
Viene de una amplia trayectoria política familiar, su abuela Hortensia Rodríguez de Porcel fue diputada provincial en 1973, y militaba en la Lista Verde junto al ex gobernador desaparecido Miguel Ragone. También sufrió la persecución y la cárcel desde 1974.
“Las reuniones de la Lista Verde, con Ragone, siempre se hacían en la casa de mi abuela Hortensia, acá en el barrio 20 de Febrero”, acota Puggioni.
Su tía abuela, Seferina del Carmen Rodríguez Copa, fue la primera diputada nacional por Salta en 1952, en 1955 fue detenida tras el golpe militar.
“Creo que sería un orgullo para mí, que desde la dictadura a esta parte, podría ser el primer dirigente de la línea de Miguel Ragone que llegue a la Cámara”, dice y se emociona el candidato a diputado por la lista Izquierda Popular y que acompaña a Sergio Leavy a la gobernación dentro del Frente de Todos.
Puggioni tiene una meta “hacer crecer y representar la economía popular en nuestra provincia, las PyMEs, los pequeños productores, las cooperativas y los movimientos sociales”, para eso conformó un espacio con referentes de cada vertiente.
Él mismo viene de la pequeña y mediana empresa, como empresario gastronómico fue el primero en apostar y hacer crecer el espacio de la Balcarce. A su vez, es presidente del Centro Vecinal 20 de Febrero y fue el mentor de Salta Básquet, idea que luego lo catapultó a dirigir la Liga Salteña de ese deporte.
“Tanto la Balcarce, como Salta Básquet son realidades que se mantienen y perduran a pesar de la crisis que estamos viviendo”, sostuvo.
Para Puggioni, será importantísimo poder articular con los movimientos sociales la emergencia alimentaria para garantizar que llegue a todos los barrios y las familias se puedan alimentar y “recuperar algo de la dignidad perdida en estos cuatro años”.
Tiene como modelo para el cooperativismo, copiar el desarrollo de Santa Fe, “de los 320 municipios, en más de 200 son las cooperativas las que manejan el servicio de luz, agua, internet y pequeñas obras. Acá tenemos 44 barrios populares en los que no entra el Estado salvo para reprimir”, aseguró.
En ese sentido, el candidato a diputado sostuvo que todo ese trabajo que falta en los barrios salteños y en el interior provincial lo podrían realizar las cooperativas “con los propios integrantes de esos barrios, cordón cuneta, instalación eléctrica, gas, y de esa manera generar mano de obra local y mejorar la infraestructura de nuestros ciudadanos”.
Su otro puntal para la Legislatura se sostiene en el desarrollo económico, “Salta desarrolla mucha producción primaria, pero tenemos que sentar las bases y desarrollarnos como lo hicieron los países más importantes del mundo, agregando valor a esa materia prima”.
Puggioni propone seguir peleando por el desarrollo del Ferrocarril Belgrano, “es lo más importante para nuestra provincia, necesitamos transporte económico para que llegue al puerto”.
El modelo a seguir
Pero, a su vez, agregó que se debe tener una visión de la “América profunda, con convenios de desarrollo económico regionales con Evo Morales. Si yo tuviera que elegir un primer viaje, elegiría Bolivia, porque seguramente necesita mucho de la Argentina y nosotros podríamos ser la puerta de acceso con el único país de la región con crecimiento económico”.
Para fomentar el desarrollo sostiene la idea que lleva el candidato a gobernador por el frente de Todos, Sergio Leavy de crear un Banco Industrial.
Cree fervientemente en la intervención del Estado en lugares clave para la provincia, como la minería, el agro y las grandes cadenas de supermercados.
Para Puggioni, la provincia debería intervenir de lleno en la minería, “no solo en términos del cuidado del medio ambiente, somos los dueños del litio y tenemos que reglamentar desde la Cámara cómo y quiénes van a generar trabajo en este sector”.
Recordó que “una sola minera va a contratar a 10 mil personas y yo no he visto ningún movimiento de parte del gobierno, eso me alarma. Los proveedores de esas mineras podrían ser PyMEs y cooperativas salteñas”.
Tampoco dejó de lado otro de los commodities en los que puede intervenir la provincia: “el presupuesto de la provincia es de poco más de 80 mil millones de pesos y una cosecha de Salta Forestal es de mil quinientos millones de dólares, y se queda en manos de Olmedo y sus testaferros”, por lo que “diría que se puede duplicar el presupuesto de la provincia recuperando Salta Forestal”.
Para ello, propone una “Sociedad del Estado, algo así como Aguas del Norte, de esa manera se podrían proteger mejor las tierras e incluso distribuir una porción entre pequeños productores que beneficiarían al mercado interno”.
Por último, sostuvo que es fundamental la mano del Estado interviniendo en el mercado y asegurando que la producción salteña llegue a las góndolas de las grandes cadenas de supermercados, “debemos generar una ley de góndolas que obligue a esas cadenas a ofrecer los productos que realizamos los salteños”.