La Justicia rosarina condenó a un sanatorio, un anestesista y dos aseguradoras por las heridas sufridas por una mujer tras ser operada de cálculos en la vesícula. Luego de la intervención quirúrgica, en 2013, la paciente ser incorporó en la camilla y golpeó contra el pie del suero, la lámpara del quirófano y el equipo de video. Padeció una herida abierta y traumatismo en el hombro izquierdo. Cuatro días después, fue sometida a una operación traumatológica, también con anestesia general. La agitación o excitación psicomotriz es un síndrome caracterizado por hiperactividad motora y alteraciones emocionales, según expresa el fallo que publicó el portal Tiempo de Justicia. El juez en lo civil y comercial, Marcelo Quaglia, destacó que "la diligencia de los médicos debe apreciarse con un criterio severo porque al intervenir valores tan trascendentes, la menor imprudencia, negligencia o descuido tendrá una dimensión especial que le confiere singular gravedad". Y agrega: "Se le exigirá una diligencia máxima teniendo en cuenta la mayor capacidad de prevención del profesional". El fallo expresa que "no medió la atención y contención del paciente tras el acto quirúrgico". En ese sentido, añade que "en relación con los hospitales, sanatorios y clínicas se reconoce que pesa sobre ellos una obligación tácita de seguridad hacia quien acude a los servicios que brinda". El sanatorio Los Alerces deberá pagarle a la paciente cerca de 2 millones de pesos, entre capital e intereses. También fue condenado el anestesista y dos compañías de seguro.