El General Director de Carabineros, Mario Rozas, sostuvo que las denuncias por detenciones ilegales, torturas en estaciones del metro, disparos a quemarropa, lanzamientos de personas desde vehículos policiales, robos y golpizas en cárceles “no son violaciones a los derechos humanos” y admitió que si esa fuerza de choque cometió “errores”, fueron “en un rango bastante aceptable”.
Las denuncias contra la fuerza de seguridad chilena por la represión a las protestas que desde hace 20 días tienen presencia en las calles de Chile no solo fueron hechas por particulares sino también por organismos como la Asociación Nacional de Defensores de Derechos Humanos (Andedh), que en ese país tiene eco internacional.
Y no solamente eso. Varios casos también fueron registrados por fotógrafos y camarógrafos que transmiten a diario las masivas manifestaciones que exige la renuncia del presidente Sebastián Piñera.
Frente a este cuadro y ante las continuas acusaciones, Rozas dijo como si nada: “Tengo que ser muy honesto y decir que somos una institución que adopta 14 millones de procedimientos al año. Somos una de las policías a nivel mundial que, con esa cantidad de procedimientos, comete errores sí, pero en un rango bastante aceptable“.
Producto de la represión en las calles, ya murieron alrededor de 20 personas y la cantidad de detenciones excedieron los conteos oficiales. Lo que sí se sabe es que hay alrededor de 500 niños y adolescentes detenidos y unos 1500 heridos, según datos del Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile (INDH).
El organismo indicó, también, que hasta el momento se presentaron 166 querellas por homicidios, torturas y violencia sexual.
Frente a las denuncias “no tenemos nada que ocultar”, afirmó ayer Piñera, el máximo responsable del accionar de las fuerzas de seguridad cuestionadas en los informes nacionales e internacionales.
En las últimas horas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió realizar una visita al país, sumándose a la misión de la Alta Comisionada de ONU para los DDHH que ya está en Chile. "Establecimos transparencia total en las cifras porque no tenemos nada que ocultar", dijo Piñera en un acto en la sede de gobierno.
Otras nueve organismos internacionales de Derechos Humanos, entre ellos la Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT), arribaron esta jornada a Chile "para escuchar testimonios de víctimas de posibles vulneraciones y violaciones de derechos humanos", según dijo en rueda de prensa Paulina Acevedo, vocera del Observatorio Ciudadano que coordinará el trabajo de esta misión en Chile, que presentará sus conclusiones el próximo lunes.