El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció este jueves que mantendrá su apoyo para el desarrollo de obras de infraestructura en la Argentina con desembolsos pendientes por unos 6.000 millones de dólares y ratificó su disposición para adecuar esos recursos a las prioridades del nuevo gobierno de Alberto Fernández . La decisión se anunció luego de un encuentro que el presidente electo mantuvo en Ezeiza, apenas llegó de México, con el titular del organismo, Luis Alberto Moreno.
Moreno transmitió a Fernández que el BID es socio estratégico de Argentina y apoyará, no solamente en áreas tradicionales como infraestructura, protección social, salud, educación y desarrollo urbano, sino también en sectores donde el banco se encuentra en la vanguardia global, como productos de conocimiento, agenda digital, innovación y competitividad que forman parte del plan del nuevo gobierno.
En la reunión se hizo un repaso de las operaciones de financiamiento al desarrollo que el BID tiene con Argentina, a efectos de evaluar su alineamiento con las prioridades del nuevo gobierno. La cartera activa del BID con el sector público argentino se compone de 65 operaciones por un total de 10.000 millones de dólares con un saldo a desembolsar de 6.000 millones de dólares.
El presidente del BID expresó el compromiso de trabajar intensamente con el nuevo gobierno para adecuar la cartera de operaciones a sus prioridades, informó la oficina de prensa de Fernández. Por otra parte, el Banco y los equipos del nuevo gobierno están iniciando el proceso de diálogo para la elaboración de la Estrategia de País con Argentina 2020-2023, consistente en un acuerdo donde se define el apoyo del BID al plan y prioridades fijadas para ese periodo.
Además, BID Invest, brazo del Grupo BID que promueve el desarrollo de los países miembros de América Latina y el Caribe a través del sector privado y trabaja en una multiplicidad de sectores de actividad, apoyará y atenderá las necesidades y demandas del sector privado argentino. En la reunión, Fernández y Moreno conversaron igualmente sobre la situación mundial, la evolución de la región, el comercio global y regional, así como las iniciativas y procesos de integración regional y subregional.
Moreno ya se había reunido con Fernández a mediados de septiembre, cuando éste todavía era candidato. Aquel encuentro, pedido por el titular del organismo, tuvo lugar en el búnker de la calle México 337. En aquella ocasión realizaron un repaso sobre los créditos en marcha y también se analizó la situación de los préstamos que el BID aprobó, pero que por algún motivo el gobierno de Macri no estaba aplicando. Según informaron entonces en el comando de campaña del Frente de Todos, los proyectos aprobados y no aplicados sumaban unos 6 mil millones de dólares y Alberto Fernández se comprometió a ponerlos en marcha lo más pronto posible en caso de llegar a la Casa Rosada. Esa promesa es la que empezó a cumplir este jueves.
Las personas clave en la relación entre el BID y la Argentina actualmente son José Luis Lupo Flores, el ex ministro de Economía de Bolivia y actual gerente del Departamento del Cono Sur del banco; Martín Soto, subsecretario de Relaciones Financieras Internacionales de Economía y ex funcionario del BID; y Federico Poli, director ejecutivo por el país en Washington.
Fundado en 1959, el BID es una de las principales fuentes de financiamiento a largo plazo para el desarrollo económico, social e institucional de América Latina y el Caribe. El BID también realiza proyectos de investigación de vanguardia y ofrece asesoría sobre políticas, asistencia técnica y capacitación a clientes públicos y privados en toda la región.