La columna vertebral del movimiento peronista, la CGT, tiene todo listo para ofrecerle a Alberto Fernández una fuerte expresión de respaldo. Para eso, el binomio que conduce la central sindical --Héctor Daer y Carlos Acuña-- consiguió que participen la casi totalidad de los gremios confederados, unos 143. Estos ocuparán la mayoría de las butacas que tiene el salón Felipe Vallese en el histórico edificio de la CGT de la calle Azopardo. Incluso estará presente el camionero Hugo Moyano pero la foto que dejará este encuentro lejos estará de representar la deseada unidad sindical.
En un principio la reunión tenía el formato de un plenario de secretarios generales. Sin embargo, las diferencias que permanecen entre los diferentes sectores que forman parte del universo cegetista llevó a que la conducción lo transformara en un encuentro con el presidente electo. Un plenario, según el estatuto de la CGT, implica la posibilidad de que los secretarios generales realicen discursos y ese podría se el momento donde los frenos inhibitorios de algunos sindicalistas no funcionen y se expresen las todavía fuertes diferencias que persisten entre los grupos internos. Así las cosas, todo se redujo a un discurso de presentación a cargo de Daer y luego llegará el turno del presidente Fernández que tendrá todo el tiempo que requiera para hablarles a los dirigentes sindicales.
El salón Felipe Vallese tiene 300 butacas y como tal, habrá un sector destinado a gobernadores, intendentes, diputados y senadores nacionales, provinciales y también las autoridades del PJ con José Luis Gioja a la cabeza. De esta manera, el salón estará completo y no contará con la presencia de barras que impedirá cualquier conflicto posible. La unidad de la CGT está por ahora en el discurso de la mayoría de sus integrantes pero el proceso para concretarla se prevé extenso y complicado. De hecho, Moyano fue uno de los que demoró en confirmar su presencia. Por caso, el canillita Omar Plaini (aliado del camionero) aseguró que "es el presidente al que votamos así que vamos a ir a escucharlo. Las diferencias son nuestras, no es responsabilidad para nada de Alberto Fernández". Entre las organizaciones sindicales especialmente invitadas está la Corriente Federal de los Trabajadores (CFT), esa donde confluyen Sergio Palazzo (bancarios) y el piloto Pablo Biró, y también el ex triunviro Juan Carlos Schmid.
La presencia de la CTA resultó más complicada por la resistencia de algunos dirigentes gremiales que encuentra compentencia entre los gremios de la central que conduce Hugo Yasky. Sin embargo, la salida que resuelve ese problema fue que tanto Yasky como Vanesa Siley (judiciales) participarán en su calidad de diputados nacionales del Frente de Todos y santo remedio. Hace once años fue la última vez que un presidente visitó la CGT. En 2008 estuvo la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien fue acompañada por Néstor Kirchner para un homenaje a los abogados secuestrados en la denominada "Noche de las Corbatas".