El actual intendente salteño y referente del macrismo, Gustavo Sáenz se convirtió en el nuevo gobernador salteño con el 53.84% de los votos (375.784) y de esta manera reemplazará a Juan Manuel Urtubey, que finaliza en un mes su tercer mandato y completará 12 años en el gobierno.
Saénz incrementó la cantidad de votos con respecto a las PASO, en las que obtuvo 292.690 votos y elevó porcentualmente su ventaja sobre Sergio Leavy que llegó al 26%, más lejos quedó Alfredo Olmedo con un 15%.
Durante su discurso en los festejos, el electo gobernador expresó que en Salta “no hay grieta, ni vencedores, ni vencidos”, agradeció el llamado de ambos contrincantes y los convocó a trabajar por Salta. Aunque previamente subrayó que nunca tomó la campaña provincial como una elección nacional: “por eso no busqué la bendición de nadie, solamente la del pueblo salteño”, en una clara alusión a Leavy, que se referenció con Alberto Fernández y Cristina Fernández como uno de los ejes de su campaña.
También confirmó que mañana se reunirá con Urtubey para iniciar la transición “en paz y con madurez política, como debe ser”. Si bien el gobernador salteño se declaró "prescindente" en estas elecciones, varios de sus funcionarios trabajaron para la candidatura de Sáenz, por lo que se estima habrá continuidad de nombres y políticas en algunas áreas y sectores del ejecutivo provincial.
Al momento de los agradecimientos nacionales, Sáenz enumeró al electo presidente Fernández, que lo saludó mediante un mensaje, y con el que manifestó que trabajará para sacar al norte de la histórica postergación en la que se encuentra.
También agradeció a Sergio Massa, Horacio Rodríguez Larreta, Roberto Lavagna, al presidente Mauricio Macri y especialmente al ministro Rogelio Friguerio, por ser el que le abrió las puertas del gobierno nacional y le permitió conseguir las obras que se hicieron en Salta con fondos aportados por la Nación.
En esa tanda de saludos, el gobernador electo sintetizó su trayectoria política reciente y sus fluctuaciones ideológicas que dificultan encasillarlo dentro de un espacio, a pesar de que en las dos últimas elecciones nacionales su estructura trabajó para el macrismo. Al respecto dijo que nunca fue presionado para poder conseguir una obra, “se acabaron los tiempos del látigo y la chequera”, expresó.
Saénz logró reinventarse como una novedad en la política luego de ser derrotado sorpresivamente en las elecciones provinciales del 2013, en las que se postulaba como senador provincial. Esos dos años de ostracismo, borraron los 19 años anteriores en los que, desde que asumió por primera vez como concejal en 1994, ostentó siempre algún cargo electivo o como funcionario municipal .
En 2015 consiguió la intendencia e inmediatamente fue elegido por Massa como compañero de fórmula en las elecciones presidenciales de ese año. Apenas asumió como jefe comunal comenzó a trabajar para llegar a gobernador, sabiendo que se le presentaba una oportunidad única ante el obligado recambio de Urtubey, que alcanzó el máximo de relecciones permitidas por la Constitución.
Ayer finalmente pudo alcanzar ese ansiado objetivo con un alto porcentaje de votos, entre sus primeras medidas adelantó el llamado a una reforma constitucional para limitar los mandatos de los gobernadores a dos.
Leavy no pudo repetir
Sergio “Oso” Leavy llegó a estas elecciones generales provinciales como ganador de la senaduría nacional hace dos semanas, en una doble candidatura que levantó polémica en medio de la campaña.
Sin embargo, nunca pudo trasladar esos votos que obtuvo con la misma boleta de Alberto y Cristina, a pesar del explícito apoyo del presidente electo. Si bien sumó en forma individual unos 20 mil sufragios más que en las PASO, sufrió el corte de votos en varios municipios en los que intendentes del Frente de Todos sacaron más que el postulante a la gobernación.
Otra de las particularidades fue la pérdida de votos del FdT, que en las PASO obtuvo 220.278 con dos listas, mientras que ahora llegó a los 183.121.
Este dato pone en evidencia que la mayoría de los votos obtenidos por Miguel Isa migraron al Frente de Sáenz, tal como se especulaba en la previa debido a la cercanía afectiva que mantiene el actual vice gobernador con el intendente capitalino, al extremo de ser considerado su padrino político.
Ayer Leavy felicitó al ganador apenas se conoció el resultado, el que aceptó sin objeciones, a pesar de las denuncias y sospechas contra el sistema de voto electrónico de los días previos.
Igualmente rescató que el Frente ganó en más de 30 municipios, mantiene bloques numerosos en ambas cámaras legislativas y finalizó el proceso electoral nacional con cinco representantes en el Congreso.
Además adelantó que colaborará con el gobernador electo y puso a disposición su plan de gobierno y sus equipos técnicos para revertir los malos índices que tiene la provincia, por ejemplo, con el desempleo y la desnutrición.
Los números finales dejaron en tercer lugar a Alfredo Olmedo, con el 15% de los votos, una muy mala elección en general ya que en la previa se esperaba que podría llegar a terciar entre Sáenz y Leavy. Pero el segundo lugar obtenido en la capital, le permitió obtener bancas en la Legislatura y en el Concejo deliberante, lo que dio un tono de festejo a su bunker.
El Frente de Izquierda ratificó su mal momento y solamente obtuvo poco más del 2%. Lejos parece haber quedado ese 2013 cuando consiguió una banca en el Congreso y fue la fuerza mas votada en la ciudad de Salta.
Finalmente, Elia Fernández quedó con el 2,29% de los votos, lo que representó una mejora con su resultado en las PASO.