El 91% del presupuesto del INTA es para pagar sueldos. El porcentaje que dio a conocer el director regional de la entidad en Salta y Jujuy, José Minetti, es para describir la falta de recursos destinados a la investigación, ante el recorte de hecho decidido por el gobierno nacional.

“Desde hace dos años que no hay presupuesto propio para las estaciones experimentales ni las agencias de extensión”, dijo Minetti a Salta/12. El incremento para la partida presupuestaria en 2019 fue del 9% frente a una inflación estimada en un 50  para este año. La falta de relación entre la actualización del presupuesto y la inflación se arrastra desde 2015. En algunos casos se puede llegar a continuar con las investigaciones por recursos que ingresan por programas externos al INTA o sus cooperadoras. Pero desde la entidad “los profesionales están sin posibilidades de continuar su formación y actualización de conocimientos”.

Las consultas a Minetti se hicieron tras el informe emitido en el canal de noticias C5N, en el que el director nacional del INTA, Héctor Espina, sostuvo que el ajuste en la entidad fue del 80%. Al hablar en números, Espina destacó que el gobierno de Cambiemos quitó 8100 millones al INTA según lo que correspondía por ley por los ingresos de las importaciones. "De eso para el año que viene está previsto que de cada 34 pesos, 10 le van a dar al INTA, este año, en cambio, de 14 pesos, que deberían ir todos, nos dieron 7", denunció. El saliente director nacional será reemplazado por el mendocino Carlos Parera, quien pasó por Salta cuando realizó sus estudios secundarios.

Dos años sin recursos

Minetti destacó que una nueva forma de generar los proyectos de investigación tenía que ver con detectar problemas y oportunidades. Se realizaron las planificaciones para volcarlas a través de la investigación pero hace dos años esperan los recursos para poder empezar a concretar los proyectos.

“No aparecen los fondos. Nunca esto se había demorado tanto tiempo”, afirmó.

Desde el INTA las políticas se vuelcan en todos los sectores de la producción. La diferencia es que por el nivel del productor hay algunos con los que se firman convenios para la investigación (como sucede con los grandes productores), y otros que precisan mayor acompañamiento (como los medianos y pequeños productores o la llamada agricultura familiar). Para graficar la diferencia, mientras el primer grupo cuenta con un mayor acceso a la tecnología, el sector más vulnerable está reclamando por agua en el Chaco salteño

Los técnicos del organismo cuyo trabajo está en los territorios se ven además con la dificultad de la movilidad, dado que son pocas las camionetas con las que cuentan. El presupuesto no alcanza para mantenimiento o reparación.

Para Minetti, esa diferencia entre unos y otros productores también tiene que ver con los lineamientos que bajó el gobierno nacional al restringir los fondos para la ciencia y la técnica en todos los ámbitos estatales.

“Si continuamos por esta línea se corre el riesgo de que en 2020 directamente no haya más presupuesto”, para la investigación en el INTA, señaló.

Un laboratorio sin recursos

Minetti puso de ejemplo que en la Estación Experimental Cerrillos, en Salta, hace dos años se inauguró el laboratorio de alta complejidad que cumple con los requisitos más estrictos de bioseguridad y los protocolos necesarios. Pero no hay presupuesto para incorporar el recurso humano especializado para hacerlo funcionar. Ni tampoco para los servicios básicos.

Ante ello funciona realizando los trabajos que ya se venían haciendo en el INTA como el análisis de suelo, la calidad del agua, de forraje, de semillas, entre otros. “Fue una inversión muy importante pero hoy es imposible” hacerlo funcionar para la totalidad de los objetivos propuestos, sostuvo. 

Préstamo de prepo 

El 28 de octubre el gobierno de Mauricio Macri dispuso, mediante el decreto 740/2019, que el INTA constituyera "una aplicación financiera gratuita a favor del Tesoro Nacional" por $8.500.000.000 (el decreto también deriva dinero de otros organismos al Tesoro Nacional).

Para concretar esta operación el decreto dispone la emisión de pagarés. En el caso del INTA, “un (1) pagaré del Gobierno Nacional al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria por un monto de valor nominal de pesos ocho mil cien millones (V.N. $8.100.000.000)". Estos pagarés vencen el 12 de marzo de 2020, es decir que el gobierno cambiemita deja la obligación de devolverlos a la gestión del presidente electo Alberto Fernández

"Nos saquearon", sintetizó el gremio que reúne a trabajadores del INTA, APINTA. Destacó que por el gobierno nacional les quitó "8.100 millones del presupuesto del INTA que nunca nos autorizaron a gastar”. Y subrayó que esta decisión llegó en un “contexto de desfinanciación” del organismo. La entidad gremial comparó: este monto equivale a 12 años del presupuesto para funcionamiento, o 7.000 camionetas doble cabina.

Los derechos de importación son la principal fuente de ingresos del INTA. Como este gobierno abrió las importaciones, hubo una mayor recaudación. Sin embargo, a pesar de contar con mayores recursos, el organismo solo pudo gastar lo autorizado por ley de presupuesto. Esto generó un saldo a favor de INTA, recursos que quedaron depositados en su cuenta bancaria.

Como las cuentas del Instituto están jaqueadas por la inflación, en septiembre del año pasado el Congreso aprobó un refuerzo de 400 millones para su presupuesto anual. Sin embargo, la Jefatura de Gabinete autorizó a gastar solo 130 millones de ésos y recién en septiembre de este año. Además, recientemente el gobierno nacional rechazó un pedido de refuerzo de cuota de $50.000.000, necesarios para ejecutar la totalidad del presupuesto anual para gastos operativos, combustibles, reparaciones, mantenimiento edificios, insumos laboratorio.