Figuran en el puesto 142 del ránking de selecciones que realiza la FIFA, sobre un total de 209 representativos. Nunca lograron clasificarse a una Copa de su continente, menos que menos a un Mundial. Es más, ya quedaron afuera del certamen que se realizará en Qatar recién dentro de tres años. Entonces, sobradas razones tenían los hinchas comorenses para invadir masivamente el campo de juego del estadio de Malouzini -con capacidad para 10 mil espectadores- tras el empate que consiguió su selección como local ante Egipto, una verdadera potencia del fútbol africano, siendo la máxima campeona continental y habiendo jugado el último Mundial de Rusia.

El partido que terminó igualado sin goles -donde no estuvo Mohamed Salah por la visita- correspondía a la segunda jornada de las Eliminatorias para la Copa de Africa que se disputará en Camerún en 2021 y, con el punto, Comores quedó al frente del Grupo G, con cuatro unidades. Toda una excepción en la historia de la nación de economía pesquera, compuesta por tres islas ubicadas en el sur del continente y que tiene menos de un millón de habitantes (los egipcios son, por caso, 99 millones).


El jueves pasado, por la primera fecha, los isleños se habían impuesto por 1-0 a Togo como visitantes con gol de Fäiz Selemani, atacante del Kortrijk de Bélgica. Justamente los togoleses habían sido quienes sacaron de carrera para Qatar a Comores por septiembre pasado, al ganar la serie de primera ronda de Eliminatorias Africanas: 1-1 en las islas y 2-0 en Togo.

Vaya manera de terminar el año para la ignota Comores, que recién volverá a la actividad por este certamen en agosto del año próximo, cuando visite a Kenia, que marcha segunda en la zona con dos unidades, al igual que Egipto, y por sobre Togo, que tiene una. Los dos primeros del grupo, que consta de seis encuentros, clasificarán a la fase final de la Copa, algo que por el momento, Comores nunca sucedió. Pero quién les quita lo invadido.